Más botaderos o industrializar basura

Un problema que demanda mayor atención por parte de las autoridades locales es el constante aumento de la cantidad de basura, particularmente en las ciudades, donde es innegable el crecimiento poblacional, a pesar de las cifras mostradas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), después del reciente Censo de Población y Vivienda. Y es que, por presiones de autoridades de zonas rurales, muchos habitantes de urbes fueron obligados a viajar a provincias donde tienen terrenos en propiedad, para ser censados allí.
En todo caso, por la expansión de poblaciones, la ubicación de rellenos sanitarios es motivo de conflictos entre dirigentes vecinales y autoridades locales. Al respecto recordemos que hace poco por un bloqueo que iniciaron vecinos del Distrito 15 de Cochabamba, que pedían que sea anulado el contrato con una empresa que debía industrializar la basura, por 24 años, del relleno sanitario de K’ara K’ara, en esa ciudad se acumularon los desechos por 11 días, con los consiguientes riesgos para la salud de sus habitantes.
Después de varios intentos infructuosos, delegados de los vecinos y autoridades municipales llegaron a un acuerdo para anular dicho contrato y lograr que dicho botadero sea usado por seis meses más, para después ser cerrado totalmente. Es decir que se deberá buscar otras maneras de instalar una planta de industrialización de desechos o buscar sitio para abrir otro botadero. De cualquier modo, la solución encontrada es temporal y se requiere tratar dicho asunto con la mayor atención, pues tiene que ver con la salud pública.
Lo cierto es que, particularmente en las ciudades, la acumulación de basura provoca malestar, por falta de civismo de los propios vecinos que suelen echarla en cualquier lugar de las calles. Por otra parte, cuando las empresas encargadas del recojo fallan, por diversos motivos, la basura queda al aire libre y a expensas de canes callejeros, lo que implica riesgo de enfermedades para la población.
Por esas y otras razones, es muy importante iniciar oportunamente la industrialización de la basura, para recuperar lo que pueda ser reciclado y, de esta manera, ampliar la capacidad de los botaderos. Además, la basura una vez discriminada, puede ser convertida en abonos para la agricultura, servir para la fabricación de cartones y envases de diverso tipo. Industrializando la basura, se podría crear empleos, organizar empresas colaterales que permitan un uso continuo y efectivo de derivados para varios rubros. Sobre todo, se podría liberar sitios donde hasta ahora se deposita residuos sólidos que, al ser enterrados, deterioran la calidad de la tierra.
Asimismo, industrializar desechos sólidos implica cuidar el sistema ecológico, enriquecer tierras, disciplinar a la población porque debería clasificar todo lo que desecha. También así se logrará preservar las ciudades en buen estado y disminuir la polución y presencia de productos que, al descomponerse, se convierten en peligros para la salud.