En la vida ordinaria resulta difícil concebir que un producto, efecto de la investigación y trabajo del ser humano, tenga muchos beneficios para la vida y, a la vez, capacidad y propiedades para causar males cuando, como componente de bebidas, no se tenga cuidado en su consumo, que debe ser racional. Y es quem el acoholismo puede causar tantos males como los que pueda soportar el cuerpo humano. Son incontables los beneficios que proporciona el alcohol al ser humano, cuando es debida y oportunamente utilizado, como disolvente o para uso medicinal. Se indica cómo se lo debe utilizar y para qué es conveniente.
Por el contrario, su uso indebido es perjudicial para la gente. Nos referimos al alcoholismo que, a través de varios siglos, es causante indirecto de muchas muertes en el mundo, sea por la adicción a las bebidas alcohólicas o porque causa diversas enfermedades, tanto en ricos como en pobres, por lo que resulta decisivo para seguir con vida o facilitar la llegada de la muerte. La ingesta de excesiva cantidad de bebidas con alcohol y peor si son de mala calidad, puede causar el inicio de muchas enfermedades, pues afecta a órganos internos del cuerpo humano.
También el consumo sin medida de bebidas alcohólicas puede incitar a cometer actos de extrema gravedad, como accidentes de tránsito, con saldo de heridos y muertos. Además de agresiones sin contemplaciones, pues el alcohol en bebidas deprime el sistema nervioso central, hace que sea más lenta la actividad cerebral. Y puede cambiar estados de ánimo, causando la pérdida de control. También afecta a la memoria e impide pensar con claridad. Asimismo, causa la falta de coordinación y control del cuerpo humano.
Por ello la humanidad está librada a lo que se haga con el alcohol y sus derivados. Corresponde que todos combatan vicios como el alcoholismo y otros como la drogadicción, que son los más destructivos del ser humano. No puede haber cese alguno en una lucha contra estos males que tienen que ser reducidos por todos los medios, pues afectan a cantidades considerables de individuos.
Los males derivados del alcoholismo son varios y decisivos para la destrucción de familias y el surgimiento de diversos conflictos, además de causar enfermedades y pobreza. En consecuencia, tales problemas causan preocupación general y crece el empeño para encontrar soluciones, a fin de ayudar por solidaridad a quienes caen en las redes de este mal. Por ello el alcoholismo está entre los males que asuelan a la humanidad y serán necesarias más campañas masivas para concienciar a la población a fin de disminuir sus efectos.
Mucho más se puede decir sobre los riesgos de abusar del consumo de bebidas alcohólicas y los daños que puede ocasionar; en todo caso, es preciso que haya cuidado y prudencia en su uso y consumo, tomando en cuenta todo lo referido anteriormente.
Alcohol, portador del bien y del mal
Armando Mariaca
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