En un contexto en que las transacciones bancarias son cada vez más fáciles y rápidas, es importante que los usuarios estén conscientes de los riesgos que implica compartir una cuenta bancaria con terceros. Las cuentas bancarias ofrecen comodidad para manejar el dinero, pero también pueden convertirse en un peligro cuando se usan para fines ilícitos.
El Banco Ganadero brinda consejos para que los usuarios tomen medidas preventivas en cuanto a la privacidad de sus cuentas bancarias y así evitar involucrarse en actividades ilícitas que puedan perjudicarlos a largo plazo.
Carola Aguilera, subgerente de Marketing del Banco Ganadero, explica por qué es fundamental no prestar la cuenta bancaria a otras personas, incluso si se trata de familiares o amigos.
- Responsabilidad legal
«Cuando permites que otra persona use tu cuenta para realizar transacciones, estás asumiendo la responsabilidad total de cualquier actividad que ocurra en la cuenta», comenta Aguilera. Aunque las intenciones puedan ser buenas, el titular de la cuenta es quien responderá ante las autoridades por cualquier transacción sospechosa o ilícita que se realice.
En Bolivia, la Ley 393 de Servicios Financieros estipula que los titulares son responsables de las operaciones en sus cuentas. Esto significa que, si la cuenta de un usuario se usa para actos criminales como el lavado de dinero, esa persona podría ser investigada o incluso sancionada por delitos ajenos.
- Riesgo de fraude y estafas
“Prestar tu cuenta también te expone al riesgo de fraudes. Los estafadores pueden utilizarla para recibir dinero obtenido de manera ilegal, lo que puede llevar a la congelación de tu cuenta y a la pérdida de acceso a tus propios fondos. En el peor de los casos, podrías enfrentar dificultades para demostrar que no estuviste involucrado en las actividades ilícitas», agrega la ejecutiva.
- Impacto en el historial bancario
Las instituciones financieras monitorean cuidadosamente todos los movimientos de sus clientes, y cualquier actividad inusual o sospechosa puede afectar tu historial bancario. “Un mal historial puede complicar tu capacidad para acceder a servicios como créditos y préstamos en el futuro. Incluso si no tuviste malas intenciones, el banco podría considerar que tu cuenta fue usada irregularmente, lo que podría resultar en su cierre», explica Aguilera.
- Consejos prácticos para evitar riesgos
Para protegerse de estas situaciones, Aguilera aconseja nunca compartir una cuenta con terceros; desconfiar de cualquier solicitud que parezca sospechosa; si se detecta cualquier actividad inusual en la cuenta, es necesario reportarla inmediatamente al banco.