Cirugía de Cálculos en la Vejiga
Es un procedimiento mínimamente invasivo, con anestesia regional, que se utiliza para la destrucción y extracción de piedras del uréter y la vejiga.
Ésta técnica tiene muy baja morbimortalidad, amplio rango de seguridad, corta estancia hospitalaria y logra la extracción completa de los litos (piedras).
¿Cómo se lleva a cabo la cirugía?
Se accede al cálculo renal a través de una punción en la piel a nivel lumbar, o bien a través de la uretra hasta la vejiga o el uréter, según donde se encuentre el cálculo. Lo que se introduce es un tubo de fibra óptica con una punta rígida y flexible, conectado a una cámara. Una vez que se visualizan los cálculos, se fragmentan con la pulsación del láser. La energía que contiene el láser permite fragmentar el cálculo de forma rápida.
Se recomienda que el paciente acuda acompañado puesto que es una intervención ambulatoria, pero después requerirá asistencia para volver a casa. Deberá estar en reposo, tomar antibiótico y antiinflamatorios.
Al siguiente día de la intervención el paciente ya puede retomar su vida normal.
Durante el día del procedimiento, el paciente deberá:
- No beber ni comer nada durante varias horas previas a la intervención.
- Tomar los medicamentos indicados por el especialista solo con un pequeño sorbo de agua.
Es necesario que el paciente tome muchos líquidos durante las próximas semanas de la intervención: Entre 8 a 10 vasos diarios para ayudar a eliminar cualquier fragmento.
Un mes después de la intervención se efectuará al paciente un estudio metabólico, evaluando la orina y la sangre durante 24 horas para estudiar los factores que pueden intervenir en la formación de los cálculos. A esto se añade un estudio químico, para analizar los componentes exactos del cálculo.
Dr. Iván Arturo Velueta – Cirujano Urólogo / Especialista en Cirugía de Mínima Invasión