Cocalero convertido en fantasma de Halloween

Evo Morales hizo dos declaraciones, tratando de movilizar a los campesinos para evitar ser apresado mediante una orden judicial, debido a que es acusado por estupro y trata y tráfico de personas, delitos que habría cometido durante su tránsito por la presidencia del Estado Plurinacional.
Opiniones sobre tales acusaciones muestran con claridad la personalidad alienada y la cultura política reaccionaria de este personaje. En primer lugar, ordenó a los campesinos evistas: “¡Bloqueen. Quieren apresarme. Bloqueen!”. Luego amenazó: “Si me apresan, habrá un levantamiento campesino y militar”.
Esas palabras hacen ver la comisión de delitos, lo que, sin embargo, pareciera que no es de conocimiento del presidente Arce ni de su Ministro de Gobierno, adoptando así el gobierno de turno una actitud liberal, ante el asombro de la ciudadanía, que se ha visto sin defensa alguna, en momentos en que el país se encuentra en una encrucijada mortal por bloqueos de caminos.
Es necesario observar que hay medidas de presión justas e injustas. En este caso, el bloqueo de vías ordenado por el jefe del MAS es injusto totalmente y diferente de los que en otros tiempos realizaban los campesinos, por motivos hasta cierto punto aceptables.
Debemos preguntarnos, ¿cuándo los bloqueos o levantamientos son justos? La respuesta es cuando son iniciados en busca de grandes objetivos colectivos, como liberarse del pongueaje, conseguir la propiedad de la tierra, libertad, incorporarse a la sociedad, acabar con la tiranía de los hacendados feudales, etc.
En cambio, un bloqueo como el actual de Evo, ninguno de esos objetivos persigue. Hoy son movilizados los campesinos evistas para que el caudillo cocalero no sea juzgado por estupro y otros delitos sexuales, los que se afirma fueron cometidos cuando era presidente del Estado Plurinacional.
Hay, pues, abismal diferencia entre bloqueos justos e injustos y eso está fuera del alcance de la mentalidad vacilante de Evo Morales, que ahora cree que todos los campesinos apoyan sus equivocados planes.
Hay que observar, a la par, que el bloqueo de estos días no es apoyado por todos los rurales del país, excepto algunos de Cochabamba y zonas fronterizas. Los campesinos aymaras de La Paz y Yungas no han movido ni un dedo a favor de Evo, al igual que los demás departamentos, porque se encuentra solo y nadie le hace caso, excepto cuando hay dinero a la vista.
Por esos aspectos, el bloqueo de caminos ordenado por Evo va a terminar en un enorme cero y va a acabar con su desprestigiada imagen. Evo Morales se mostrará como un fantasma de Halloween, porque sus proclamas no son justas, ni mucho menos.