Hace días atrás, estudiantes universitarios participaron en una prueba pedestre con el objetivo de promover la recaudación de alimentos para una obra benéfica. Los albergues de personas mayores y mujeres que sufren violencia serán las beneficiadas.
Desde primeras horas de la mañana, hace días atrás, personal de la Policía Boliviana, del Gobierno Autónomo Municipal de El Alto (Gamea), junto a colaboradores de Unifranz, se desplegaron en torno a la ruta de la competencia, desde la avenida del Aeropuerto, la Ceja y la Plaza de la Cruz de Villa Adela, en el que brillan los “cholets”, emblemas turísticos de la ciudad de El Alto.
Para Wilson Sangalli, jefe de la Unidad de Turismo de la Alcaldía alteña, la carrera no solo visibilizó el corazón solidario de los alteños, sino también elevó el potencial turístico de la ruta de los cholets.
“Es una actividad muy interesante, en el sentido de que ha habido muchos participantes que han podido realizar la actividad y además por una causa benéfica, de poder compartir todo aquello que se ha reunido a estos lugares que más lo necesitan, agradecer a Unifranz”, comentó el funcionario edil.
De acuerdo con Héctor Rafael Mamani –uno de los más jóvenes de la competición– que viene desde la provincia José Manuel Pando, cerca la frontera boliviano peruana, la carrera fue una especie de desahogo. “Me ha pasado una tragedia y yo dije, voy a correr para recuperar lo que he perdido, por ese motivo he competido”, relató.
Entre las mujeres campeonas, la primera en cruzar la línea final fue Betty Valle Sánchez, originaria del municipio de Viacha: “corrí porque me gusta el deporte y este tipo de competencias son propicias para entrenar y mejorar marcas. Agradezco a Unifranz por organizar la carrera”.
La 5K Unifranz –una carrera de altura y de esperanza– logró recaudar una tonelada de alimentos, donados por los participantes al momento de inscribirse a la competición.
“La 5k de Unifranz nos ha demostrado que, al unirnos por una causa muy especial, podemos lograr grandes metas. Hoy los albergues de personas mayores, de la terminal y de mujeres que sufren violencia, recibirán una gran noticia, beneficiarse con el aporte de cada uno de ustedes. Eso es comunidad, eso es transformar la naturaleza de las cosas y también es el propósito que tenemos”, dijo visiblemente emocionada Pilar Hidalgo, directora de la Fundación Unifranz que junto a la universidad sede El Alto, lograron llevar adelante la competición.