Un grupo de exbecarios bolivianos que estudió en diferentes cursos ofrecidos por la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) sostuvo una reunión con el embajador de Japón en Bolivia, Hiroshi Onomura.
El encuentro se realizó el 31 de octubre en la residencia diplomática japonesa, en la zona de Calacoto.
Los exbecarios de la JICA se formaron en Japón en diversas esferas, tales como salud, turismo, educación, medioambiente, prevención de desastres o agricultura, entre otras.
Durante la reunión, organizada conjuntamente con la Embajada y la JICA, los invitados compartieron sus experiencias e intercambiaron sus puntos de vista sobre cómo profundizar todavía más las relaciones entre Bolivia y Japón, además de aplicar todo lo aprendido a favor de su país.
Por su parte, el embajador Onomura, motivado porque este año se celebran 110 años de relaciones diplomáticas y 125 años de la inmigración japonesa a Bolivia, expresó su deseo de que los exbecarios sean un puente de amistad entre Bolivia y Japón. En números, dijo, los más de seis mil becarios bolivianos simbolizan la misma cantidad de lazos de amistad entre ambos países, lo cual es un logro del programa de capacitación administrado por la JICA por más de 45 años.
Entre los más de seis mil profesionales bolivianos capa-citados en Japón hay funcionarios estatales y municipales, además de profesionales técnicos de institutos de investigación y organizaciones sin fines de lucro. Algunos de ellos crearon una red de contactos para coordinar su trabajo en beneficio de ambos países.
El Programa de Becas de la JICA se constituye en uno de los principales pilares de la cooperación japonesa para el desarrollo de recursos humanos. Los becarios, a su retorno, deben presentar un plan de acción para aplicar lo aprendido en sus instituciones, de manera que se conviertan en multiplicadores de los conocimientos adquiridos.
