La comuna paceña presentó tres pilares con los que prevé plasmar su “Plan Integral de la Tormenta a la Esperanza y de la Esperanza a la Acción”, además para reducir los riesgos en la ciudad durante la época de lluvias asegura que se ejecutan 19 “superobras” destinadas a estabilizar zonas, reparar y reconstruir canales de los ríos.
El trío de cimientos que diseñó la comuna paceña es a nivel institucional, social y territorial. El secretario Municipal de Resiliencia y Gestión de Vulnerabilidades (Smrgv), Juan Pablo Palma, explicó que debido a diferentes fenómenos climatológicos como La Niña, el municipio de La Paz trabaja para mitigar los riesgos que implicarían las posibles manifestaciones típicas e intensas de lluvias que se registrarían a partir de diciembre.
Sostuvo que en el pilar institucional, se fortaleció las capacidades internas con la capacitación de 552 funcionarios en temas como salvaguardas, comando de Incidentes, contención emocional, manejo defensivo para conductores, planes comunitarios de gestión de riesgo de desastres, planes familiares, evaluación de daños, manejo de albergues, manual esfera y protección de niñez en emergencias.
Asimismo, se diseñó el Plan Municipal de Emergencia, planes de contingencia ante inundaciones y movimientos en masa, como deslizamientos, así como los planes de acción ante contingencias de cada macrodistrito.
“Lo más importante: tenemos planes de acción a nivel macrodistrital elaborados por nuestras subalcaldías. Contamos, además, con mecanismos de coordinación y articulación, como son el Comurade (Comité Municipal de Reducción de Riesgos y Atención de Desastres el COEM) y nuestro sistema de comando de incidentes. Con el apoyo de Caritas y de Save the Children, tenemos equipamiento nuevo para la situación de emergencias. Con la asistencia del Banco Mundial, durante más de un año y medio, La Paz tiene un Sistema de Alerta Temprana mejorado”, detalló Palma.
En el ámbito del segundo pilar: el social, se capacitó a 2.158 vecinos, conformaron 15 Comités de Emergencia Barrial y Comités de Acompañamiento de Obras, además de que 1.155 familias cuentan con Plan Familiar de Emergencias y 73 miembros forman parte de los SATs Vecinales (Sistema de Alerta Temprana).
En cuanto a lo territorial, se tiene 182 kilómetros de ríos, quebradas, embovedados y canalizaciones evaluados. También se identificaron 137 puntos de monitoreo geodinámico visual e instrumentado, tanto con GPS como con inclinometros. Todo esto permite tener un Plan de Acción de Reducción de Riesgo de Desastres en el Municipio.
OBRAS
En tanto, para reducir los riesgos en la ciudad durante la época de lluvias, la comuna paceña ejecuta 19 obras destinadas a estabilizar zonas, reparar y reconstruir canales de los ríos, además de lograr un adecuado control hidráulico de las cinco cuencas que tiene La Paz: Choqueyapu, Orkojahuira, Irpavi, Achumani y Huayñajahuira.
“Estamos ejecutando 19 obras por enfoque de reducción de riesgo de desastre, son 214 millones de bolivianos que estamos destinando de manera exclusiva a ‘superobrass en todos los sectores de la ciudad”, acotó el funcionario edil.
Entre las obras que están en ejecución está la estabilización de ochos zonas de San Antonio con pilotes, el embovedado del río Alpaco, la canalización del río Irpavi y la estabilización de Kantutani, donde se reconstruirá la avenida Libertad para ingresar a los Puentes Trillizos.
También se ejecutaron 52 intervenciones de obras de control hidráulico y se invirtieron 3.5 millones de bolivianos en 71 gaviones. “En los trabajos de mantenimiento son 3.8 millones de bolivianos para 68 puntos de trabajos de reparación en ríos y 94 trabajos de índole geodinámico, entre peinados, caída de rocas, protección con mallas, 614 hidrotúneles limpiados, con más de un millón de bolivianos invertidos”, detalló.
En materia de sumideros limpiados y reparados la Alcaldía ejecutó 1,2 millones de bolivianos. Se intervino 16 puntos para la configuración de taludes con maquinaria, 165 sectores de ríos trabajados con camellonados, escorellados, trabajos de encauce, limpieza de desarenadores y retiro de material de arrastre.
“Son más de 1.500 actividades entre las desarrolladas por las subalcaldías y las secretarías, 277 millones de bolivianos, más de 21.000 volquetas con material de arrastre, material de terraceo, escombros y basura retirada de los ríos. Todo esto equivale a 84 piscinas olímpicas, todas llenas de material”, acotó Palma.
OBSERVACIÓN
Sin embargo, el concejal paceño Javier Escalier, advirtió que no hay información sobre un actual mapa de riesgos, cuya entrega estaba comprometida para febrero pasado, como establece la Ordenanza Municipal N° 064/2022.
Según el concejal, la falta de un mapa de riesgos actualizado deja a La Paz sin una herramienta vital para anticipar desastres en esta temporada de lluvias. “Hace más de un año, el alcalde se comprometió a presentar en febrero el nuevo Sistema Integral de Gestión de Riesgos a través de la ordenanza 064/22; sin embargo, este plazo ya venció y seguimos sin esa base esencial para prevenir emergencias”, criticó Escalier.
La última versión del mapa de riesgos se elaboró hace 13 años, utilizando datos del Censo de 2001, lo cual lo convierte en un recurso inadecuado para la gestión actual de riesgos en la ciudad. Escalier indicó que, en lugar de este documento fundamental, la Alcaldía ha ofrecido solo una imagen satelital, insuficiente para identificar con precisión los factores de riesgo.