Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur pusieron en marcha ayer una segunda tanda de maniobras conjuntas ante la creciente tensión con China y Corea del Norte, lo que incluye el despliegue de buques de guerra, portaaviones y cazas.
El Ministerio de Defensa japonés informó en un comunicado de que las maniobras, conocidas como “Freedom Edge”, se concentrarán fundamentalmente en el mar de China Oriental y tienen como objetivo mostrar la «fortaleza y capacidad» de la alianza formada por los tres países frente a sus rivales geopolíticos en la zona.
«Las maniobras se llevan a cabo de acuerdo con el memorando de cooperación en materia de seguridad firmado por los ministros de Defensa de los tres países. Al firmar el acuerdo, los ministros se comprometen a contribuir a la paz y la estabilidad en la península de Corea, en la región del Indo-Pacífico y en las regiones fuera de sus fronteras», señala el documento.
Así, detalló que por la parte japonesa participan el destructor “JS Haguro”, el avión de patrulla “Orion P-3”, los cazas “F-15” y “Mitsubishi F-2” y un Boeing. A estos se suman dos destructores surcoreanos, un avión de patrulla y varios cazas “F-15”.
El Ejército estadounidense desplegó su portaaviones “George Washington”, los destructores “Higgins”, “McCampbell” y “Dewey”, un avión de patrulla y varios cazas “F-15” y “F-18”.
Se trata de las primeras maniobras trilaterales de este tipo que abarcan varios ámbitos de interacción de forma simultánea. La primera parte fue llevada a cabo en verano e incluyó ejercicios por tierra, mar y aire.(EP)