Cinco personas resultaron heridas, una de ellas de gravedad, tras el impacto de fragmentos de un misil interceptado por las defensas antiaéreas de Israel en la región de Bnei Brak y Ramat Gan, cerca de Tel Aviv.
Entre los heridos, una mujer de 54 años fue trasladada en estado grave al Hospital Beilinson. Los demás afectados sufrieron heridas leves y moderadas por esquirlas generadas tras la intercepción, según informó el servicio de ambulancias Magen David Adom.
El proyectil, lanzado desde el Líbano por el partido-milicia Hezbolá, fue destruido a gran altura, pero sus restos causaron incendios y daños materiales en edificios y vehículos. Las Fuerzas Armadas israelíes confirmaron que se trató de un misil tierra-tierra interceptado y continúan investigando el incidente, que aumenta las tensiones en la región.