El político Mohamed Al Bashir fue nombrado ayer primer ministro en funciones de la transición de Siria hasta marzo, informó la televisión siria, controlada ahora por las fuerzas que derrocaron al régimen de Bashar Al Assad.
«El Gobierno en funciones de la fase transitoria dura tres meses bajo la presidencia de Mohamed al Bashir», señalaron fuentes de la Administración Política Siria a la televisión, después de la celebración de una sesión del Consejo de Ministros en la que se traspasaron los poderes del gabinete del anterior régimen a un nuevo Ejecutivo.
En este encuentro, en el que no acudieron responsables de Interior y Defensa, estaba el anterior primer ministro sirio, Mohamed Ghazi al Jalali, y Al Bashir, entre otros, para hacer el traspaso de carteras y «poner en marcha el trabajo».
«Este encargo fue por parte del Mando General. Se nos encomendó llevar el gobierno de Siria en funciones hasta 1 de marzo de 2025», señaló Al Bashir en una declaración televisada, difundida por el canal de televisión saudí Al Arabiya.
Los insurgentes encargaron a Al Bashir, presidente del Gobierno de Salvación Nacional, la administración de facto en la provincia de Idlib controlada por el Organismo de Liberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham o HTS) antes de la ofensiva que comenzó el 27 de noviembre, que lidere la transición en el país.
Al Asad huyó de Siria el domingo y pidió asilo en Rusia tras ser depuesto tras una ofensiva rebelde que tomó la capital siria tras hacerlo en las ciudades de Alepo, Hama y Homs en una contienda relámpago de menos de dos semanas.
Damasco arrancó su tercer día tras la caída de Al Asad en calma e inaugurando una tímida nueva normalidad, con los servicios y suministros recuperando su labor. La capital siria, hasta el domingo plagada de barreras, puestos de control y barrios vedados, sigue sin presencia de fuerzas de seguridad de ningún tipo.
En la ciudad, los edificios públicos siguen cerrados, pero ya se atisbaban cafés y pequeñas tiendas abiertas, autobuses de transporte público funcionando y algunos jóvenes estudiantes caminando con libros en el entorno de la Facultad de Arte y Humanidades de la Universidad de Damasco. Los hoteles, súbitamente poblados de periodistas extranjeros, comenzaron a preparar habitaciones y a recuperar a sus empleados, ofreciendo servicios mínimos, incluida la restauración, tras unos días en los que el acceso a alimentos estuvo limitada. Este martes está también previsto que abran los bancos y los mercados.
«CRIMINALES DE GUERRA»
Ahmed al Charaa, el líder del movimiento islamista que derrocó a Al Asad y conocido como el nombre de guerra de Abu Mohamed al Golani, aseguró que perseguirán a los «criminales de guerra» y darán a conocer pronto una lista con los nombres.
«No dudaremos en exigir responsabilidades a los criminales, asesinos, oficiales de seguridad y del Ejército implicados en la tortura del pueblo sirio. Perseguiremos a los criminales de guerra y los exigiremos a los países a los que huyeron para que reciban su justo castigo», señaló en un comunicado publicado en la cuenta oficial del Mando de Operaciones Militares de la coalición insurgente.
«Anunciaremos una primera lista que incluya los nombres de los principales implicados en la tortura del pueblo sirio», agregó en una nota en la que señaló que ofrecerán «recompensas a quienes proporcionen información sobre altos cargos militares y de seguridad implicados en crímenes de guerra».
«Afirmamos nuestro compromiso de tolerar a quienes no tengan las manos manchadas con la sangre del pueblo sirio, y concedimos amnistía a quienes estaban en servicio obligatorio», apuntó, en referencia al anuncio realizado este lunes por Al Golani.
FLOTA MILITAR DE ASAD
El ministro israelí de Defensa, Israel Katz, confirmó que la Armada de Israel destruyó toda la flota militar del depuesto régimen de Bachar al Asad, mientras sus tropas terrestres siguen apostadas dentro del área desmilitarizada de la frontera. «La Marina de Israel operó el lunes por la noche destruyendo con éxito la flota siria», señaló Katz durante una visita a una base naval en Haifa, en el norte de Israel.
Los ataques a gran escala desde los buques de guerra israelíes se llevaron a cabo, afirman, para evitar que las capacidades y el armamento de la marina siria cayeran en manos de las fuerzas insurgentes, la mayoría islamistas y proturcas.
El Ejército israelí había confirmado horas antes que había entrado en territorio sirio, además de haber bombardeado intensamente zonas cercanas a la frontera con los Altos del Golán ocupados e incluso el puerto de Latakia, en la costa mediterránea. Niegan, sin embargo, estar avanzando hacia Damasco, después de que un medio libanés y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos informaran de que el Ejército israelí estaba cada vez más cerca de la capital siria.
«Las fuerzas del IDF (Ejército israelí) no están avanzando hacia Damasco. Esto no es algo que estemos haciendo o busquemos de ninguna manera», confirmó en una rueda de prensa el portavoz militar para la prensa extranjera, Nadav Shoshani, quien detalló que las tropas israelíes se posicionaron en toda la zona desmilitarizada entre Israel y Siria y en algunos «puntos adicionales», tanto en el lado sirio de la frontera como en el israelí.
Shoshani afirmó además que los soldados israelíes trabajan en coordinación con los efectivos de la Fuerza de las Naciones Unidas de Observación de la Separación (UNDOF, según sus siglas en inglés), que supervisa la zona desmilitarizada.(RTve)