“La primera guitarra eléctrica que me compraron mis padres al ver mi afición por el instrumento y la música rock de los setentas, fue una Yamaha cuando cumplí 16 años, con la cual fundé el grupo Conga y viajé por primera vez a tocar en un festival de música rock a Jujuy, Argentina, antes de culminar la secundaria.
Posteriormente, en 1972, ya generando ingresos con las presentaciones, adquirí la guitarra Gibson SG, que era el mismo modelo con la que Santana tocó en Woodstock. Con ella grabé mi primer disco sencillo en Heriba con el grupo Tabú en 1972, el álbum El Inca de Wara en 1973 y el álbum A los niños con amor de Estrella de Marzo en 1974.
En 1975, año en el que se grabó el primer álbum de música fusión entre la música nativa, criolla y contemporánea, titulado Maya, del grupo Wara, se me presentó la oportunidad de adquirir la famosa y única guitarra Gibson Les Paul Custom (negra), más conocida entre los guitarristas como la ‘Black Beauty’, y con ella realicé presentaciones, giras y grabaciones de los discos Paya, Kimsa, Pusi Pheska y Sojta hasta 1992.
La guitarra Gibson Les Paul Custom es producida por Gibson Guitar Corporation desde 1952 y es considerada, junto con la Gibson SG, Fender Telecaster y Fender Stratocaster, una de las guitarras eléctricas de cuerpo macizo más populares del planeta.
LA PÉRDIDA
En 1990, al día siguiente de un concierto realizado por Wara en el Teatro Municipal “Alberto Saavedra Pérez”, me dirigí a ese escenario a recoger mi amplificador y estacioné mi vehículo en la calle Sucre, pues un bloqueo no me permitió estacionar en puertas del teatro, lo que demoró mi salida. Y grande fue mi sorpresa y frustración al llegar a mi vehículo y encontrarlo con la chapa forzada y sin la guitarra, por lo que fui a la Policía a sentar la denuncia. Triste y desconsolado me fui a casa y cancelé la presentación que tenía con mi grupo alternativo Latin Jazz en Matheus Piano Bar.
Por varios meses me sentí frustrado y sin ganas de volver a los escenarios. Sin embargo, adquirí una guitarra nueva Fender Stratocaster y en ese tiempo le compuse un tema instrumental a mi guitarra Gibson Les Paul, al cual titulé “Vuelve” (incluido en el álbum Sojta de Wara), con la esperanza de recuperarla en el tiempo.
Transcurrió un año desde la pérdida y un viernes, cuando estaba tocando en el Matheus Piano Bar, me llaman de casa y me indican que vieron en el programa Metro Policial que la policía capturó a un autero y que en su depósito encontraron muchos objetos robados, entre ellos una guitarra negra, por lo que me preguntaron, ¿no será la tuya?
El lunes siguiente fui a la Policía y vi la guitarra sin cuerdas, toda empolvada, sin botones. En un principio no la reconocí, sin embargo al ver su cuerpo posterior estaban las cicatrices que quedaron de las hebillas de mis cinturones en mis tiempos más rockeros y, felizmente, al tener la constancia de la denuncia que realicé cuando me la robaron, la recuperé y mi guitarra efectivamente “volvió”, tal vez al conjuro del tema que le compuse. Desde entonces juré nunca más descuidarme de ella, no sacarla de mi casa a ninguna presentación en vivo y solo usarla para grabaciones en estudio.
MUSEO DE INSTRUMENTOS MUSICALES EN USA
A finales del año pasado, el curador PhD. Daniel Piper del Museo de Instrumentos Musicales de Phoenix, Arizona, llegó a Bolivia para adquirir varios instrumentos autóctonos de viento, cuerdas y percusión y habilitar en el museo un pabellón dedicado a Bolivia, incluyendo instrumentos de los maestros Ernesto Cavour, Clarken Orosco y Rolando Encinas, entre otros. Grande fue mi sorpresa cuando me contactó y me dijo que el Museo estaba interesado en adquirir mi guitarra con la cual grabé varios discos de Wara. Pensé que el Museo estaba interesado en una de mis guitarras criollas, pero cuando vino a mi estudio me dijo que el Museo estaba interesado en mi guitarra eléctrica Gibson Les Paul Custom, tomando en cuenta que los instrumentos eléctricos de Wara forman parte imprescindible en el nacimiento de la música fusión en Bolivia. Le comenté que la guitarra era de 1973 y por tanto tenía 50 años de antigüedad y que por ello su valor era bastante alto en el mercado de guitarras reliquia, tratando de desanimarlo y más bien animarlo a adquirir una de mis guitarras acústicas criollas. Me dijo que consultaría con el Comité del Museo. Pasadas dos semanas me llamaron del Museo para indicarme que el Comité aceptó pagar el precio solicitado y que me estaban enviando el contrato de compra y los requisitos para su exportación desde Bolivia. Al colgar el teléfono me puse tan triste que unas lágrimas asomaron a mis pupilas, pensando que lo mejor quizás sería conservarla. Posteriormente me puse a reflexionar y me dije a mi mismo: De aquí a unos años, cuando yo deje esta vida terrenal, solo Dios sabe qué pasará con mi guitarra preferida, en cambio si la cedo al Museo, desde hoy sabré que se encuentra en un sitial que le corresponde, orgullosa en tan famoso Museo y en exposición permanente, junto a instrumentos musicales legendarios, provenientes de todo el planeta, entre ellos la guitarra PRS de Carlos Santana, una Telesquire de Keith Richards de los Rolling Stones, una Les Paul Deluxe de Pete Townsend del grupo The Who, otra Les Paul de Taylor Swift, etc. y, además, seguro que en algún momento podré ir a visitarla personalmente. Actualmente la guitarra ya se encuentra en el Pabellón Bolivia del Museo, en exposición permanente.
El Museo de Instrumentos Musicales (MIM – MUSICAL INSTRUMENTS MUSEUM) de Phoenix, Arizona, tiene una colección de 13.000 instrumentos musicales de toda índole y provenientes de más de 200 países, con exhibiciones interactivas de videos explicativos y conciertos en vivo que se organizan en su Teatro. También se lo puede visitar virtualmente a través de su página web https://mim.org o de su página de Facebook.
TRAYECTORIA MUSICAL
El guitarrista boliviano Carlos Daza Leytón, a lo largo de su trayectoria musical, al margen de fundar y tocar con Trash, Conga, Tabú, Wara, Latin Jazz y Renovación Wara, realizó conciertos, giras y grabaciones con los grupos Estrella de Marzo, Collage, Luz de América, Sombra y Luz, Revólver, Blue Jean y con figuras destacadas de la música nacional, como Ernesto Cavour, Zulma Yugar, Edgar Yayo Jofré, Luis Fernando del Río, Ema Junaro, Música de Maestros, Fernando Jiménez, Donato Espinoza y Antonio Barrientos, y ha sido Profesor de guitarra clásica en el Conservatorio Nacional de Música durante cuatro gestiones en los años 80, así como en el Centro Yamaha y las Academias Honner y Suma Artis
“El 12 de diciembre de 2009, el Blog argentino DkO Rockuras publicó la lista de los 100 mejores guitarristas hispanoamericanos, tomando en cuenta: La habilidad con el instrumento, Trayectoria, Influencia, Creatividad y Originalidad, posicionando a Carlos Santana en el puesto No.1, Pappo en el No. 2, Gato Alquinta en el No.3… y Carlos Daza de Wara en el puesto No. 50 (http://dkorockuras.blogspot.com)”