En poblaciones de Sud Yungas se desarrollaron los acontecimientos de mayor trascendencia en las jornadas guerreras después de la revolución paceña del 16 de Julio de 1809. Esos enfrentamientos armados contra fuerzas de los ejércitos españoles fueron el origen de la victoria final que ocasionó la fundación de lo que hoy es Bolivia.
Dos siglos han transcurrido desde entonces y ahora surge el talento literario de Aldo Cabrera Reguerín, un joven intelectual irupaneño de nacimiento, que después de una larga investigación histórica, relata en su libro “Antecedentes y consecuentes históricos de la Revolución de 1809 en Los Yungas de La Paz y sus implicaciones epistemológicas-paradigmáticas”, todas las batallas en las que los luchadores yungueños de esa época, vencieron a famosos jefes militares que comandaban los ejércitos adictos a la Corona española, como Jerónimo Valdez y Francisco Javier Aguilera, famoso “exterminador de guerrilleros”.
En sus páginas figuran los nombres de muchos patriotas que murieron en combate o en el terrible cadalso. Y todos los honores póstumos se concentran en la actuación de héroes yungueños como Manuel Victorio y José Miguel García de la Lanza, además del gallego Gabriel Antonio Castro. En estos relatos, conmueven las escenas de los desiguales enfrentamientos bélicos entre patriotas y adictos a la Corona española en Laza, Irupana, P’uri y Chicaloma.
Para que el lector tenga mayor información, el autor relata esos acontecimientos comparando diferentes versiones o interpretaciones de escritores e historiadores como Gabriel René Moreno, Rosendo Gutiérrez, Nicolás Acosta, Agustín Aspiazu, Bautista Saavedra, Manuel María Pinto, Humberto Fossati y Alipio Valencia Vega, entre otros.
Y lo más notorio en el libro de Aldo Cabrera es el tema tratado en uno de sus capítulos: “El día que Irupana obstinadamente se declaró realista y La Santa bendijo su fidelidad a la Corona española, un caso único en el territorio de la Intendencia de La Paz”.
Continúa el texto con los siguientes temas: los prolegómenos de la Revolución de 1809 en La Paz; la polémica sobre la tenencia o no de alma de los nativos del Nuevo Mundo; duras críticas a la Santa Inquisición y diferentes opiniones sobre la actuación del obispo Remigio La Santa, organizador de tropas militares afines a la Corona española en Irupana.
Y siguiendo con el tema de La Santa, un capítulo está dedicado a la excomunión que éste lanzó desde Irupana como “castigo” para los insurgentes yungueños acantonados en Chulumani. En este documento, Manuel Victorio García de la Lanza, Gabriel Antonio Castro y sus seguidores son declarados “malditos del Eterno Padre Celestial, del Hijo y del Espíritu Santo”.
En “Yungas de La Paz: temible foco de rebelión para Goyeneche”, es el relato de los enfrentamientos armados entre patriotas y realistas en P’uri y Chicaloma, con la victoria de los segundos.
La investigación de Aldo Cabrera culmina con la descripción, captura y suplicio de los revolucionarios Manuel Victorio García de la Lanza y Castro.
En últimas páginas, la iconografía muestra diseños y planos de la época con escenas de rutas y batallas en Chulumani, Laza, P’uri y Chicaloma, además del camino de herradura utilizado por Pedro Domingo Murillo para conducir hasta Cochabamba a los habitantes de Irupana durante la sublevación indígena de 1781.
Y otro dato no muy conocido: cuando fue creada la República de Bolivia, por Ley del 5 de enero de 1827, el Congreso cambió los nombres de las poblaciones yungueñas en reconocimiento a su lucha liberadora: Chulumani por Villa de la Libertad, Coroico por Villa de Sagárnaga e Irupana por Villa de Lanza, en honor a Manuel Victorio García de la Lanza.
El texto de Aldo Cabrera Reguerín es un excelente trabajo de investigación sobre los enfrentamientos armados en Sud Yungas en 1809.
El autor es dibujante, escritor y periodista.