La fragmentación de las búsquedas, el auge de la inteligencia artificial y la implementación de mediciones avanzadas son algunos de los elementos que definirán el futuro del posicionamiento web. Les presentamos un análisis de estas tendencias con la colaboración de MJ Cachón, de la agencia Laika.
“Lo que conocemos hasta ahora va a experimentar un cambio profundo. Hasta que ese momento llegue, no podremos dimensionar realmente la magnitud de la transformación. Esto implica que debemos aprender a convivir con la incertidumbre”. Esta afirmación, que encapsula la realidad diaria de quienes se dedican al SEO, fue el punto de partida de la presentación de MJ Cachón, directora de la agencia especializada en estrategia y SEO, Laika, quien compartió las tendencias para 2025 en el ámbito del posicionamiento web.
Adaptación y flexibilidad
El entorno SEO actual demanda una flexibilidad sin precedentes. Con cambios constantes y un ecosistema de búsqueda en constante evolución, los profesionales deben priorizar la agilidad y la capacidad de experimentación. Esto implica desarrollar estrategias dinámicas basadas en pruebas y análisis continuos.
Para tener éxito, es fundamental entender que Google no es solo una herramienta, sino un ecosistema en expansión. Esto requiere monitorear las direcciones de sus actualizaciones y ajustar las estrategias en consecuencia.
Fragmentación de las búsquedas: Más allá de Google
Aunque Google sigue siendo el líder indiscutible, las búsquedas están cada vez más fragmentadas. Factores como la regulación en Europa, que permite a los usuarios seleccionar su motor de búsqueda predeterminado, junto con el crecimiento de plataformas como TikTok e Instagram, están redefiniendo el panorama. Especialmente entre los jóvenes, estas plataformas se utilizan para investigar destinos de viaje, tendencias y actividades, relegando a Google a un segundo plano en ciertos contextos.
Además, los costos por clic (CPC) en Google Ads continúan aumentando, lo que obliga a una mayor integración entre estrategias orgánicas y pagadas. Las empresas deben explorar otros motores de búsqueda y formatos para maximizar su alcance y adaptarse al comportamiento cambiante de los usuarios.
Inteligencia Artificial: Una herramienta, no una solución definitiva
La inteligencia artificial generativa ha revolucionado el SEO, pero no debe considerarse como la solución definitiva. Herramientas como ChatGPT o Perplexity ofrecen nuevas oportunidades, pero su uso debe ser estratégico. Aunque son útiles para automatizar tareas como la investigación de palabras clave o la creación de esquemas, depender completamente de ellas para generar contenido sin supervisión puede comprometer la calidad y originalidad.
El enfoque debe ser claro: utilizar la IA para complementar los procesos creativos en lugar de reemplazarlos. La clave estará en reutilizar contenido existente en nuevos formatos—por ejemplo, vídeos en plataformas sociales—y mejorar la visibilidad en buscadores integrados con IA, como Bing con su Copilot.
Este artículo forma parte de nuestro «Especial Tendencias 2025», donde 28 expertos del sector anticipan lo que está por venir en el mundo del marketing y el eCommerce para el próximo año.Calidad, autenticidad y originalidad: los pilares del contenido SEO
A pesar de su corta trayectoria en la generación de contenido, la inteligencia artificial generativa ha inundado la web con textos, imágenes y diversas creaciones. Por ello, la calidad y autenticidad se han vuelto más cruciales que nunca, convirtiéndose en los principales diferenciadores. Las estrategias que solo replican contenido existente pierden relevancia frente a aquellas que ofrecen nuevas perspectivas o insights. Esto implica que se debe priorizar el esfuerzo humano en la creación de contenido que aborde necesidades reales de los usuarios.
Google ha elevado sus estándares de calidad en la indexación, desestimando páginas que no cumplen con requisitos mínimos. Las empresas deben centrarse en producir contenido bien estructurado, original y basado en datos propios o experiencias únicas. Este enfoque no solo mejora la satisfacción del usuario, sino que también facilita destacar en los resultados de búsqueda.
Medición avanzada: Redefiniendo las métricas
El desafío actual radica en cómo medir el éxito en este nuevo entorno. Con la aparición de plataformas y modelos de búsqueda innovadores, es esencial desarrollar métricas personalizadas que reflejen estos cambios. Esto incluye ratios de calidad y actividad que identifiquen páginas de bajo rendimiento y permitan ajustes precisos.
Herramientas como mapas de calor y análisis del comportamiento del usuario son fundamentales para comprender mejor las necesidades de los usuarios y diseñar experiencias optimizadas. La integración de disciplinas como UX (usabilidad del usuario) y CRO (optimización de la conversión) se vuelve crucial para asegurar que los contenidos no solo atraigan, sino también retengan a los usuarios.
Crear, medir, adaptar
El futuro del SEO exige flexibilidad, un enfoque en la calidad y apertura hacia nuevas plataformas. Aunque el ecosistema de búsqueda está fragmentándose, el objetivo sigue siendo el mismo: satisfacer al usuario. Apostar por la autenticidad, medir constantemente y adaptar estrategias mediante prueba y error serán los pilares para mantenerse relevante en un campo caracterizado por el cambio constante.