La Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype) y una diputada del MAS denuncian irregularidades en la compra de gorras para actos del Bicentenario en Sucre, señalando que habrían sido fabricadas en China. Según datos del Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes), el costo unitario de las gorras fue de 28 bolivianos, y se cuestiona la calidad del material y el estampado.
El dirigente de Conamype, Juan Carlo Vargas, citado por Correo del Sur, aseguró que el Gobierno planea adquirir más de 20.000 gorras de origen chino para estas celebraciones, lo que calificó como un menosprecio a la mano de obra calificada de los microempresarios bolivianos.
Asimismo, denunció que esta adquisición no respetaría el Decreto 4505, que prioriza la compra de productos «Hecho en Bolivia».
El jueves de la semana pasada, la diputada del MAS Soledad Pérez también cuestionó la compra y afirmó que los microempresarios bolivianos podrían fabricar gorras de mejor calidad por solo 12 bolivianos la unidad.
Además, señaló que decisiones como esta contradicen los principios de industrialización y reactivación económica del país. «Este gobierno no está apoyando a la industria nacional. ¿Vamos a seguir promoviendo el producto chino mientras los microempresarios desaparecen?», declaró.
Sin embargo, la ministra de Culturas, Descolonización y Despatriarcalización, Esperanza Guevara, desmintió ayer las acusaciones. En conferencia de prensa, explicó que en 2023 se adquirieron el año pasado únicamente 300 gorras estampadas para el Bicentenario, negando que se tratara de 400 o 20.000 unidades, como se había denunciado.
Además, aseguró que estas gorras fueron fabricadas por una empresa nacional legalmente constituida y no fueron fabricadas en China.
La ministra afirmó que las compras respetaron las normativas vigentes y ratificó el compromiso del gobierno con la transparencia y el apoyo a los productores nacionales. «Negamos rotundamente que se trate de gorras chinas. Este tema ha sido aclarado para evitar cualquier especulación», sostuvo Guevara.
En todo caso, la autoridad pidió disculpas a los microempresarios y aseguró que ha instruido a todo el personal administrativo ser más riguroso en priorizar la producción nacional.
Mientras crece la controversia, los sectores microempresariales insisten en un mayor compromiso con la producción local y las autoridades gubernamentales aseguran que las adquisiciones cumplieron con los estándares y normativas establecidas. (Erbol)