Cuoteo de ministerios, sin miramientos

En el año 2006, cuando el MAS arribó al poder en nuestro país, abundaron las críticas de ese partido a los llamados partidos neoliberales, a los que acusaba de numerosos males, como la discriminación y el reparto de cargos públicos entre grupos de privilegiados. Aseguraban los “masistas” que, a partir de entonces, la situación cambiaría a favor de las mayorías, que se gobernaría escuchando al pueblo, que se castigaría la corrupción, “caiga quien caiga”, que se respetaría a la madre tierra, etc., etc.
Pero tales frases han resultado falsas, porque después de casi 20 años de gobiernos masistas, abundan los casos de corrupción, el nepotismo, la repartija de pegas, así como aflora la inoperancia gubernamental para resolver graves problemas, por lo que ahora la mayoría de la población debe luchar para subsistir, en medio de detestables medidas de presión, como bloqueos de caminos, que perjudican a sectores productivos, comerciales, a viajeros y poblaciones.
También al comenzar el gobierno populista, se estableció que se gobernaría con los “sectores sociales”, pero no todos, sino los que eran afines al masismo. Por ello el dinero de la época de bonanza económica, por la venta de gas y otras materias primas, cuyos precios habían subido a niveles expectables, fue dilapidado, principalmente para favorecer a los acólitos del MAS.
Sin embargo, como resultado de ese derroche sin fin, apareció la crisis económica actual, debido principalmente a la alarmante disminución de reservas de gas, las cuales no fueron repuestas, a pesar de las advertencias de expertos en la materia. Como resultado, por la falta de dinero hoy los “sectores sociales” afines al MAS ya no reciben desde el gobierno de turno regalos como motorizados, sedes sindicales y otros beneficios, a cambio de apoyo al oficialismo.
En agonía la gallina de los huevos de oro, ahora demandan el cuoteo de ministerios, porque supuestamente “los espacios públicos les corresponden a los sectores sociales por derecho”. Según reportes periodísticos, los ministerios de Medio Ambiente y Agua, de Desarrollo Rural y Tierras, de Minería, de Culturas y de Trabajo están bajo control de sectores sociales arcistas. Hoy se sabe que el ministerio de Medio Ambiente es manejado por los interculturales, que el de Desarrollo Rural y Tierras está en poder de la Csutcb y que el de Minería está a cargo de cooperativistas, solo para mencionar algunos casos.
En consecuencia, de alguna manera se explica por qué siguen los avasallamientos a parques nacionales y terrenos privados, así como la expansión de la minería a pesar de que deja contaminación y degradación de la tierra, a lo que se suman numerosos casos de corrupción. También se observa feroces pugnas entre “sectores sociales” masistas para obtener la mayor cantidad de empleos públicos, claro está, sin que importen los méritos académicos o técnicos.
Tales problemas no tendrán solución con el “masismo”, afectó a contentar a las organizaciones sociales afines, sin tomar en cuenta que gobernar significa administrar los bienes de millones de bolivianos y que para ello se requiere gente capacitada y con ética.