Nuevo incendio obliga a trasladar a miles de personas en Los Ángeles

Mientras el Palisades Fire y el Eaton Fire, los dos incendios que asolaron Los Ángeles a principios de año, están por fin controlados, un nuevo incendio declaró en la zona, esta vez en Castaic Lake, al norte de la ciudad. Más de 30.000 personas tuvieron que ser trasladadas, incluidos los 5.000 reclusos de una prisión.
En sólo seis horas, el Hughes Fire quemó 3.500 hectáreas en Castaic Lake. Más de la mitad de la superficie destruida por el Eaton Fire, uno de los dos grandes incendios que afectaron a Los Ángeles este mes. Los vientos, la vegetación seca y la humedad muy baja ayudaron las llamas a avanzar rápidamente.
DESOCUPARON A 31.000
PERSONAS
Pero de momento estas llamas sólo arrasaron zonas naturales, y aunque las imágenes de los helicópteros, emitidas una y otra vez por las cadenas locales, pueden ser aterradoras, con colinas de fuego iluminando la noche californiana, los bomberos parecen confiados.
A diferencia de los incendios de hace 15 días, ya se desplegaron 4.000 bomberos y las condiciones son menos violentas. Se espera que los vientos amainen. Como muestra de su optimismo, la autopista 5, la vía que atraviesa toda California, reabrió en la noche tras permanecer cerrada durante varias horas.
TESTIMONIO DE MARÍA
HERNÁNDEZ
“Hay mucho humo y donde yo vivo es demasiado, caen cenizas en los ojos. Ya desocupe mi casa pero estoy acá, en el negocio. Ya se fueron todos mis empleados, los mandé a su casa. Es preocupante porque tengo mi casa y mi negocio en la misma área. Ya me pasó tres veces, con ésta. Ya sabía un poquito donde tengo mis cosas, entonces sólo agarré poquitas cosas personales, papeles importantes y fotos que no puedo reemplazar y me salí de mi casa. Me dirigí a la casa de mi hijo, la casa de mis papás. Ha pasado que el incendio llegue hasta la línea de mi casa, pero ahí fue cuando lo pararon”.
Se emitieron órdenes de evacuación para más de 31.000 personas que viven en los alrededores del lago, situado a unos 50 kilómetros al norte de Los Ángeles y cerca de la localidad de Santa Clarita.
“LO ESTAMOS
CONTROLANDO”
El jefe de bomberos del condado de Los Ángeles, Anthony Marrone, quiso tranquilizar el miércoles por la noche: “La situación sigue inestable y el fuego sigue siendo difícil de contener, pero lo estamos controlando”, declaró.
Debido a los recientes incendios en Los Ángeles, un gran número de bomberos, helicópteros y bombarderos de agua de todo el oeste de Estados Unidos siguen en el lugar, lo que facilita la lucha contra las llamas.
“La situación en la que nos encontramos hoy es muy diferente de la que había” hace 15 días, cuando los primeros incendios azotaron la megalópolis, insistió Anthony Marrone. “Este es un buen ejemplo de lo que podemos hacer cuando tenemos suficiente personal y suficientes aviones”, agregó.
Esto no impidió a las autoridades implorar a los residentes que aprendan las lecciones de los recientes incendios: en Estados Unidos, las órdenes de traslado no siempre se respetan. (RFI)