Guido G. R., dueño de la tortuga a la que rociaron bebidas alcohólicas, fue aprehendido por la Policía de Santa Cruz de la Sierra y es procesado por el delito de tráfico ilegal de vida silvestre.
El joven se encuentra sindicado como uno de los participantes del polémico hecho ocurrido en una fiesta, el cual fue filmado y posteriormente compartido en redes sociales, donde se generó una ola de críticas.
“Él señaló que no es propietario de la tortuga, pero se evidencia que, dentro de la investigación, realizó la entrega voluntaria del animal ante Pofoma (Policía Forestal y de Prevención al Medio Ambiente) y luego a Direna (Dirección de Recursos Naturales de la Gobernación)”, informó el fiscal, Miguel Gonzales.
Junto al joven otros dos fueron incluidos en la investigación, quienes también declararon ante la Fiscalía; sin embargo, el representante del Ministerio Público señaló que su aprehensión no procede porque el delito es de tratos crueles, cuya sanción es de un año.
Gonzales adelantó que en la audiencia cautelar del joven aprehendido se solicitará detención preventiva.
El 8 de enero, mientras el joven Jordi O. sostenía al pequeño reptil, otras personas le rociaron bebidas alcohólicas. Aunque fue sentenciado a dos años de cárcel, se acogió al perdón judicial por ser una pena mínima. (Santa Cruz, con datos de Erbol)