Cuatro mujeres soldado israelíes fueron liberadas por Hamás ayer en el segundo intercambio de la tregua en Gaza, acordada tras más de 15 meses de guerra. Se tratan de Karina Ariev, Daniella Gilboa, Naama Levy y Liri Albag, capturadas el 7 de octubre de 2023 en la base militar Nahal Oz. A cambio, Israel liberó a 200 presos palestinos, que salieron en autobuses de la prisión de Ofer, en Cisjordania ocupada, y de la prisión de Ktziot, en el desierto del Néguev.
El primer canje se produjo el pasado domingo, siendo liberadas tres mujeres israelíes y 90 presos palestinos como parte del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás establecido ese mismo día y que está previsto que se alargue al menos seis semanas. En él se estipula la puesta en libertad de 33 rehenes israelíes en manos de Hamás y más de 1.900 presos palestinos en cárceles de Israel.
A diferencia del domingo pasado, en el momento de la liberación, las Brigadas Al Qassam (el brazo armado de Hamás) subieron a las cuatro rehenes a un escenario, pero enseguida las bajaron y fueron entregadas a los vehículos del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), encargado de trasladar a las cuatro militares israelíes al Ejército hebreo.
Las fuerzas israelíes ya las llevaron a la base militar de Reim, a unos 7 kilómetros de la frontera con la Franja de Gaza, donde se reunieron con sus familias, y posteriormente fueron trasladas en helicóptero al Hospital Beilinson-Schneider, en la ciudad del centro de Israel de Petaj Tikva.
Mientras se producía la liberación, que pone fin a 477 días de cautiverio, la televisión israelí mostró cómo estaban viviendo el momento las familias de las rehenes y también las personas congregadas en la denominada “plaza de los rehenes”, en Tel Aviv.
SONRIENTES Y EN
BUEN ESTADO
Las cuatro soldados liberadas aparecieron en la plaza de Palestina de la Ciudad de Gaza sonrientes y en buen estado de salud. En el momento que las subieron al escenario, saludaron a los cientos de personas y decenas de milicianos palestinos de las brigadas de Al Qassam y de Al Quds allí congregados.
Fue un gran contraste a cómo se produjo la liberación de las primeras tres rehenes, que salieron de una furgoneta rodeada de milicianos armados y enmascarados y rápidamente se subieron a los todoterrenos del CICR, aparcados justo en frente.
Para esta ocasión, Hamás y la Yihad Islámica prepararon una escenografía repleta de simbología de las milicias y de banderas palestinas. En el escenario se podía leer en hebreo la frase “el sionismo no ganará”.
El ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 causó la muerte de 1.205 personas en el lado israelí, la mayoría civiles. De las 251 personas secuestradas entonces, 91 siguen en Gaza, 34 de ellas muertas, según el Ejército israelí.
PARALIZAN RETORNO
DE DESPLAZADOS
Israel acusó a Hamás de violar el acuerdo para el alto el fuego en Gaza al haber puesto en libertad a mujeres soldado antes que a civiles. “Hamás falló en el cumplimiento de sus obligaciones de liberar primero a las mujeres civiles israelíes”, aseguró el portavoz del Ejército, Daniel Hagari, en un breve comunicado poco después de que se confirmara que las rehenes entraron en territorio israelí.
Como consecuencia, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció la suspensión del protocolo de retorno de la población civil palestina al norte de la Franja de Gaza, que había sido establecido para ayer, según el acuerdo entre los dos bandos.
Concretamente, Netanyahu denunció que Hamás no liberó a la civil Arbel Yehud, secuestrada el 7 de octubre de 2023 por las milicias palestinas, tal y como estaba estipulado. “Israel no permitirá el paso de los habitantes de Gaza al norte de la Franja hasta que se haya acordado la liberación de Arbel Yehud, que debía haber sido liberada hoy”, sostuvo Netanyahu.
La organización islamista aseguró que Yehud está viva y será liberada el próximo sábado.
El portavoz en árabe del Ejército de Israel, el coronel Avichay Adraee, sostuvo que no habrá retirada de fuerzas en la zona hasta que “quede acordado” el retorno de la civil israelí y señaló a los palestinos de que “no se acerquen a la zona hasta que su apertura sea confirmada”. El Ejército israelí agregó también que la presencia de las fuerzas israelíes obedece también al protocolo de liberación de los 200 presos palestinos que serán canjeados a lo largo de las próximas horas.
El Ministerio de Interior y de Seguridad Nacional del Gobierno de Hamás había “completado todos los preparativos” para facilitar el regreso al norte de Gaza de los palestinos desplazados a partir de este domingo. Según un comunicado de este Ministerio, la calle costera Rashid se abrirá para la circulación de peatones, mientras que la de Saladino, que recorre toda la Franja desde el cruce fronterizo de Ráfah (sur) hasta el cruce fronterizo de Erez (norte), “se abrirá en una sola dirección para el regreso de todo tipo de vehículos” como coches y carros de burros.
De forma paralela, se espera que las fuerzas israelíes completen su retirada del Corredor Netzarim este sábado, localizado al sur de ciudad de Gaza y que funciona como un puesto de control militar y de inspección.
LIBERADOS 120
CONDENADOS
La Comisión de Prisioneros Palestinos (Ppsmo, por sus siglas en inglés) difundió la lista de 200 palestinos encarcelados que fueron liberados por Israel ayer como parte del intercambio, de los cuales 120 estaban condenados a cadena perpetua. Algunos serán devueltos a Gaza y otros a Cisjordania ocupada.
La Ppsmo registró que, de los condenados a cadena perpetua puestos en libertad, 81 pertenecían a Hamás, 23 a la Yihad Islámica, 13 al movimiento secular Fatah, dos al Frente Popular para la Liberación de Palestina y uno al Frente Democrático para la Liberación de Palestina.
En la lista figura el palestino más longevo en una prisión israelí, Mohamed Ahmed Abdel Hamid Al Tus, de Belén, quien lleva en prisión desde 1985 y tiene 69 años.
Un centenar de ellos llegaron a bordo de varios autobuses a Ramala, en Cisjordania ocupada, donde fueron recibidos por cientos de personas con banderas palestinas y de Fatah. De los 200 reclusos, unos 115 fueron liberados en Cisjordania, otros 15 en la Franja de Gaza y 70 en Egipto.
Con el pelo rapado y vestidos con chándal gris, los presos fueron aupados a hombros nada más bajar de los autobuses y llevados de esta manera entre la muchedumbre que ocupaba toda la plaza donde se ubica el centro de recibimiento, en medio de vítores y abrazos. (RTVE.es)