El presidente de Argentina, Javier Milei, acumuló más de 100 denuncias en su contra después de que este fin de semana instruyera a la Oficina Anticorrupción (OA) a investigar a los miembros del Gobierno ante la estafa de una criptomoneda que él mismo promocionó en redes sociales.
Fuentes judiciales confirmaron al portal de Infobae que hasta el momento se presentaron 112 denuncias contra el mandatario, por presuntamente participar de la estafa al invitar el pasado viernes en su cuenta de X a invertir en el token (ficha o moneda digital) de criptomonedas “$LIBRA”, apenas tres minutos después de que se lanzara públicamente.
La Justicia tendrá que determinar si Milei cometió un delito después de que los demandantes, damnificados y figuras de la oposición, hayan planteado que participó del fraude cometido aludiendo a las declaraciones de uno de los socios de “$LIBRA”, el empresario Hayden Mark Davis, reconociendo que había sido asesor del presidente, de quien señaló «respaldó y promovió activamente el proyecto».
Los delitos más mencionados en las demandas contra el mandatario son fraude, negociaciones incompatibles con la función pública, infracción a la Ética Pública y asociación ilícita, si bien algunas denuncias apuntan también al cohecho, según recoge el diario “Página 12”. Esta última acusación llega después de que el conocido empresario estadounidense Charles Hoskinson haya asegurado que allegados del Ejecutivo argentino le pidieron sobornos para organizarle una reunión con Milei.
Las denuncias se presentaron después de que el propio Milei ordenara a la Oficina Anticorrupción investigar si algún miembro del Gobierno había incurrido en una conducta inapropiada tras conocer que $LIBRA es en realidad una moneda meme, término que hace referencia a una criptomoneda creada como una broma por entretenimiento o tendencias de Internet, y se caracteriza por carecer de respaldo en la economía real.
El principal grupo parlamentario opositor argentino, Unión por la Patria (UxP), anunció el domingo que presentará una solicitud de apertura de juicio político contra el mandatario, al que atribuyeron la estafa, denunciando su «enorme gravedad» y que se trata de un «escándalo sin precedentes».
Desde los partidos que apoyan a Milei y desde el propio Gobierno apenas hubo reacción, con la excepción de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que dio la vuelta a la situación para presentar a Milei como víctima, asegurando que el “Criptogate” es una maniobra para «intentar bajar al presidente».(EP)