El general, Andri Hnatov, fue designado ayer como nuevo jefe del Estado Mayor del Ejército de Ucrania como parte de una «remodelación sistemática de las Fuerzas Armadas para desarrollar su eficacia de combate», en palabras del ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, en medio de una delicada situación en su ofensiva en la región rusa de Kursk, marcada por la retirada en las últimas horas de la ciudad de Sudzha.
El general Hnatov ejerció como comandante de las Fuerzas Conjuntas de las Fuerzas Armadas de Ucrania y antiguo comandante del Frente Oriental. Su predecesor, el general Anatoli Barhilevich, pasará a convertirse en inspector jefe del Ministerio de Defensa ucraniano para «garantizar el cumplimiento de las normas militares y fortalecer la disciplina dentro de las Fuerzas Armadas», de nuevo según el ministro Umerov.
Mientras tanto, el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania publicó un mapa que muestra la retirada de las fuerzas ucranianas de Sudzha, en la región rusa de Kursk. La agencia ucraniana Ukrinform pudo confirmar la validez de la actualización operativa del Ejército ucraniano, publicó a las 09.00 de ayer.
Sudzha es una pequeña localidad que se encuentra a unos 8 kilómetros de la frontera ucraniana. Fue tomada en agosto del año pasado, durante la sorprendente contraofensiva protagonizada por las fuerzas ucranianas, que llegaron a controlar 1.200 kilómetros cuadrados de territorio ruso y más de un centenar de localidades.
Durante los últimos meses, sin embargo, las fuerzas de Ucrania fueron perdiendo terreno. La Inteligencia militar británica estima que apenas controlan una tercera parte de lo que llegaron a tomar y Rusia da incluso la contraofensiva por derrotada.
Bajo control ucraniano se mantienen las localidades rusas de Oleshnia y Goholivka, a entre cinco y seis kilómetros de la frontera, según este mapa, y, hacia el sur, la de Güevo, a un kilómetro escaso de la frontera, y donde no se han producido cambios en los últimos días.
Las tropas de Kiev mantienen ocupada también una pequeña zona hacia el oeste de Sudzha, separada de la otra, aunque contigua a la frontera ruso-ucraniana, donde se halla la pequeña localidad de Nikolaevo-Darino.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, reconoció el viernes que la situación es «muy difícil» en Kursk, donde el Ejército ruso dio ayer por liberada la localidad de Goncharovka, de 3.000 habitantes y en las afueras de Sudzha.
Según el parte del Estado mayor ucraniano del sábado, en esas últimas 20 horas se habían registrado 20 enfrentamientos en Kursk y el enemigo realizó 19 bombardeos con 28 bombas aéreas guiadas y disparó 232 proyectiles de artillería.
Rusia traslado a más de 370 personas de las localidades de Kursk en plena marcha de la ofensiva para la expulsión de las tropas ucranianas atrincheradas en esa región rusa, informaron ayer las autoridades locales.
«Desde el 12 de marzo fueron trasladadas 371 personas desde las localidades liberadas, incluidos 14 menores», escribió en Telegram el gobernador en funciones de Kursk, Alexandr Jinshtéin.
Por su parte, ayer Zelensky negó las tropas ucranianas desplegadas en Kursk estén rodeadas por las rusas y afirmó en cambio que «un número significativo» de efectivos rusos se retiraron en distintas direcciones por la presión de la ofensiva. «Nuestras tropas siguen conteniendo a las agrupaciones rusas y norcoreanas a la región de Kursk. No hay ningún cerco a nuestras tropas», apuntó.(Infobae)