Las palabras del día:
«Quien aprende a amar la lectura se contacta con el reino de los dioses»
Todos creemos ser buenas personas; pero, existen algunos aspectos de nuestra vida que dicen lo contrario, por ejemplo, tratamos mal a nuestro cuerpo, lo abusamos, no dialogamos con él, no lo felicitamos, pasamos por alto sus dolores, molestias y sufrimientos, lo tratamos como si fuera nuestro peor enemigo y eso no es correcto.
Cuando alguien quiere ser buena persona debe comenzar por tomar conciencia o darse cuenta de que su cuerpo es su ángel que lo lleva a todas partes, le permite la movilidad, puede pensar, nos protege, nos cuida y nos da hermosas sugerencias y también advertencias cuando es necesario, nos da vitalidad e inteligencia, ése es nuestro cuerpo, nuestro maravilloso cuerpo.
Hace algunos años tuve una experiencia extraña, me lastimé mi rodilla y por seis meses no se sanaba y cuando leí el libro «La ley de la resonancia» de Pierre Franckh, donde alguien había recuperado su cabellera, logrando que salieran cabellos nuevos, muy pocos al comienzo, después de treinta días de hablar con su cuero cabelludo, con sus cabellos y pedirles que vuelvan a brotar, a crecer nuevamente.
Me dediqué a hablarle a mi rodilla y a pedirle que comenzara a repararse, a ponerse bien y en cuarenta y ocho horas comencé a sentir sensaciones de bienestar, de fortalecimiento y en treinta días, mi rodilla había sanado por completo.
El acto y la conducta de hablar con nuestro cuerpo y de escuchar lo que tiene que decir, ejerce un impacto positivo en nuestra vida, mejora nuestro buen humor, nuestra fortaleza interna y, sobre todo, nos ayuda a colocarnos en nuestro estado de actitud mental positiva; así que ya lo sabe, en las mañanas al despertar hable con su cuerpo, felicítelo por su increíble desempeño y háblele como si fuera su mejor amigo o su ángel de la guarda y si persevera en dialogar con su cuerpo obtendrá cambios y mejoras en su vitalidad y en su actitud interna. Nos vemos en los artículos que se publican los miércoles y sábados en su periódico preferido, EL DIARIO de Bolivia.
Sugerencia: Pruebe a tratar a su cuerpo como si fuera un invitado muy querido solo por 24 horas y vea los resultados.