Este régimen dictatorial del MAS, tendrá siempre la triste fama de haber propiciado y desencadenado la mayor bancarrota económica de la historia boliviana. Esta dictadura sindical y corporativista fracasó, lamentablemente, y los resultados de su accionar, hoy los padecemos todos los bolivianos. Nada puede justificar que los gobiernos del MAS gastaran todo el dinero del Estado boliviano, simplemente para sostener el gasto desenfrenado de la alta dirigencia masista y su insaciable apetito de poder. Todo lo paga el pueblo, hasta la factura de la crisis económica, mientras que los altos dirigentes del MAS, siguen despilfarrando los escasos recursos que ingresan a las arcas del Estado, mediante la aprobación de créditos internacionales, pero Bolivia, por su situación económica, ya ni siquiera es sujeto de crédito. Mientras, en YPFB, siguen con privilegios y todo el aparato burocrático vive de las prebendas de la corrupción institucionalizada en el país. Todo esto propiciará la caída del gobierno actual.
Su suerte, presidente Arce, es verdaderamente lastimosa. Bolivia lo detesta y carga sobre usted y el MAS toda la responsabilidad de lo ocurrido con el país. Por culpa de las especulaciones de Arce Catacora sobrevendrá la quiebra y se convertirá, junto con el ex mandatario, en los más celebres estafadores de la historia de Bolivia. Los despilfarros del régimen del MAS, nunca los supieron detener y esto acabará por precipitar su caída, más el fracaso de su modelo económico, que condenan a este instrumento político a una penuria política permanente.
Cuando la crisis económica se profundice más y los reveses y decepciones económicas se manifiesten con mayor gravedad, todas las miradas se volverán aún más hacia el gobierno. Arce Catacora y el ex mandatario sufren una notable merma en su popularidad, hasta el punto de hacer caer la candidatura del actual mandatario y el gobierno arcista en su conjunto ve desvanecer su prestigio y su poder. Tanto como ha sido posible, el presidente sale rodeado de sus ministros, pero la opinión pública inmediatamente los aplaza por incapaces, ya no basta la publicidad gubernamental, porque ni para eso hay dinero.
El presidente debe sentirse muy inquieto y nervioso, pues a la opinión publica puede ya no bastarle la renuncia de sus ministros y trate de obligar al propio presidente a renunciar al gobierno. Eso es lo quiere el ex mandatario en su pugna fratricida interna, para poder recuperar el poder, aunque está consciente de que no tiene ni la más mínima posibilidad de ganar en una contienda electoral limpia y transparente. Lo que él quiere es inmunidad e impunidad para salvar su pellejo de las acusaciones y las situaciones pendientes que tiene con la justicia.
Todo el país acusa al ex mandatario de formar un Estado dentro del Estado, uno profundo, donde cooptar, comprar y corromper se volvió la norma política para conservar el poder. Por esta razón el ex mandatario ha sido un mal presidente, en parte por causa de sus propios defectos, conocidos por todo el país, y también por culpa de sus malos colaboradores, vivimos años de angustia y de continua agitación política. El MAS es la arrogancia en el poder. El actual presidente es terco. La terquedad desnaturalizada se convirtió en una tradición en la Casa del Pueblo. Esta terquedad insana la inició el ex mandatario, para no aceptar la realidad.
COOPTARON las instituciones públicas, llenaron con gente poco preparada los cargos de gobierno, obligaron a todo un país a pensar de una manera determinada, conforme a sus propios intereses. Atraparon a muchas organizaciones sociales y campesinas, con prebendas y todo tipo de beneficios. Se apropiaron de la Central Obrera Boliviana, matando el verdadero espíritu revolucionario en defensa de los trabajadores y la convirtieron en una organización sometida a los intereses del partido. Se quedaron con el discurso de que el MAS es el único partido político que defiende a la clase humilde y el único que puede monopolizar el poder y la política boliviana. Que es el único partido que tiene derecho a hacer campaña política electoral en áreas rurales. Es decir, convencieron al país entero de que el MAS es el partido político más grande y con más fuerza política en todo el país. Claro, nada más falso en la realidad actual, por eso su caída será más dolorosa.
COMPRARON lealtades y conciencias. Para el MAS cada hombre y mujer, cada organización política, mejor si es de oposición, tiene su precio. Gobernó el país valiéndose de la corrupción, compró diputados, senadores y partidos políticos de oposición con el precio más bajo. Siempre el MAS se halló complicado en negocios turbios. Pero esos personajes políticos que fueron comprados, con todo tipo de métodos de dominación y control, ahora se presentan como los salvadores y los verdaderos opositores al régimen masista. Pero este poder que lo compra todo, hasta el silencio de medios de comunicación o el apoyo de algunos de ellos, perjudica e irrita a todos los bolivianos. Es que, comprando conciencias, opiniones y censurando la libertad de expresión, pusieron al Estado boliviano al servicio del partido político azul y del jefe de las 6 federaciones del Chapare.
CORROMPIERON las instituciones públicas, degradaron el servicio público de carrera, deformaron a los profesionales, degeneraron la política, convirtieron al Estado en Sodoma y Gomorra, abusaron sexualmente de niñas y mujeres, solo para lograr beneficios o conservar o adquirir un cargo público. Eso es el MAS, sus partidarios solo buscan el caos y la confusión, para que tomemos decisiones divididos y llegado el momento nos agarren desprevenidos. Crean tormentas, dificultades y provocan conflictos, generando caos y paralizando el país. Todo está planeado y orquestado, por el ex mandatario, pero no podrá lograr su objetivo, los bolivianos somos más inteligentes y encontraremos una solución, no haremos caso a la manipulación del régimen dictatorial. Se vienen días y meses complicados, al final saldremos de todo este atolladero, por tanto, defender la libertad política y económica contra el totalitarismo del MAS, es un deber, tanto moral como patriótico. El MAS muestra torpeza cuando se trata de dividir para reinar, nosotros demostremos inteligencia y voluntad para unir al país.
Jhonny Vargas es Politólogo y Docente de Postgrado.