Los pilotos franceses Costes y Le Brix en La Paz

Reconocidos por realizar la primera travesía sin escala en el Atlántico Sur, los franceses domadores del cielo, Dieudonné Costes y Joseph Marie Le Brix, fueron recibidos con gran entusiasmo por el pueblo paceño y las autoridades bolivianas cuando arribaron a bordo del avión Bréguet-19, bautizado como ‘Nungesser-Coli’, el día miércoles 21 de diciembre de 1927.
Procedentes del aeródromo ‘El Bosque’ de Chile, dichos pilotos volaron más doce horas. Cumpliendo el raid Santiago-La Paz sin etapas, recibidos como verdaderas celebridades y gran alborozo: “…la multitud rompiendo los cordones de tropa irrumpió al campo de aviación y se lanzó al encuentro de los pilotos. El primer saludo que recibieron Costes y Le Brix fue de uno de nuestros redactores”, detalló el periódico EL DIARIO. Por otro lado, el presidente Hernando Siles declaró: “La proeza de Costes y Le Brix es un nuevo eslabón en la cadena que nos liga a la Francia Gloriosa”. Posteriormente, fueron trasladados a la ciudad de La Paz.
Sin duda sus pasos por las calles de nuestra ciudad estuvieron siempre marcados por diversas muestras de aprecio: “…distinguidas familias han remitido a su alojamiento del Club de La Paz, ramos de flores que llevaban entrelazadas cintas con los colores nacionales de Francia y Bolivia”, anunció el periódico ‘La Razón’. Asimismo, fueron recibidos en audiencia especial por el presidente Siles y el ministro de Guerra, Felipe Guzmán. También los agasajaron los miembros de la colonia francesa, presididos por Carlos A. Boillod, en las instalaciones de los colegios ‘Sagrados Corazones’ y ‘La Salle’.
Sobre sus impresiones sobre La Paz, Le Brix declaró a la prensa: “…para todos les encarecemos hacer llegar nuestras palabras de reconocimiento y simpatía. Estamos muy satisfechos de Bolivia”. Por otro lado, Costes expresó: “La Paz, es una ciudad original. Su panorama es de lo más simpático y pintoresco. Para el europeo es una verdadera novedad pisar tierra a la altura de 4.000 metros. Cuando en nuestra patria hagamos conocer todo lo que vemos, recién se darán cuenta exacta de las maravillas que ofrecen los Andes. Por esto, les rogamos mantener constantemente intercambio con sus colegas de la prensa francesa. En los 2.100 kilómetros que hemos recorrido de Santiago a esta hermosa ciudad, hasta Antofagasta no alcanzamos a divisar ni mar ni tierra; todo era neblina. Ya en las proximidades de Arica se despejó la atmosfera. La parte más peligrosa de esta nuestra etapa, ha constituido la travesía entre Arica y El Alto. Salimos de Santiago, exactamente a horas 5 y 37, y nuestro reloj marcaba las 17 y 45 cuando llegamos al Alto. Y después de 12 horas, ocho minutos, de vuelo incesante, hemos comenzado a ser confundidos con las manifestaciones con que ustedes nos abruman”.
Por último, los pilotos Costes y Le Brix fueron condecorados con la Orden del ‘Cóndor de los Andes’, en el grado de oficial. Posteriormente, continuaron su viaje el día 29 de diciembre a la ciudad de Lima.