El diputado de la bancada de Creemos, Richard Ribera, afirmó que la resolución que emita la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) , el viernes de esta semana, acerca de la consulta sobre detentar la presidencia del Estado de manera indefinida es un “derecho humano”, dejará al descubierto la persistente intención del MAS hacerse del poder a cualquier costo.
“Estamos esperando que la CIDH emita el mismo criterio que lo hizo ya en alguna oportunidad de manera directa, en Estados Unidos, que ser reelecto presidente de manera indefinida no es un derecho humano. Tenemos que diferenciar lo que es un derecho humano de un derecho político”, puntualizó el asambleísta.
En esta misma línea, afirmó que el derecho político tampoco es consecuencia de un derecho humano, por lo que el pronunciamiento de la Corte IDH deberá saldar definitivamente la pretensión de Evo Morales de ser un “presidente perpetuo”, a pesar del rechazo de la población.
Una comisión de parlamentarios de la bancada de Creemos, en abril pasado, se trasladó a Washington donde se reunieron con altas autoridades de la CIDH, como máximo Órgano internacional promotor y defensor de los derechos humanos, donde manifestaron su preocupación por las recurrentes vulneraciones a la Constitución Política del Estado (CPE) y a los derechos de quienes piensan distinto al MAS.
Asimismo, advirtió acerca la transgresión que pesa sobre el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) al haber emitido la Sentencia Constitucional 0084/2017, en noviembre de ese año, al haber declarado procedente la Acción de Inconstitucionalidad Abstracta presentada por parlamentarios del MAS a fin de forzar la postulación y reelección presidencial de Evo Morales.
En 2018, el líder de Creemos, Luis Fernando Camacho, planteó ante la Organización de Estados Americanos (OEA) el reclamo boliviano de respeto a los derechos democráticos y ciudadanos, planteamiento que fue respaldado con más de 500 mil de ciudadanos de todo el país.
El diputado Ribera, señaló que la alternancia en el poder político constituye una de las mayores fortalezas de la democracia y del Estado de Derecho, por lo que la resolución que emita el máximo Órgano internacional de derechos humanos, en sentido contrario al MAS, podrá dar curso a la anulación de la Sentencia 0084/2017.
Precisó que la condición de no vinculante de la resolución de la CIDH no le resta importancia; por tanto, su impacto internacional sobre la credibilidad y el prestigio del país en orden internacional.