La evaluación institucional es aquella que se realiza en cada unidad educativa al concluir la gestión, después del desarrollo de los tres trimestres, para ver alcances, logros, obstáculos y qué replanteamientos se pueden realizar desde los actores educativos para no volver a incurrir en dificultades. Además, permite hacer compromisos de acción para mejorar la institución y buscar un impacto en la próxima gestión escolar.
También uno de los conceptos que más se utiliza menciona que la evaluación institucional es una etapa dentro del proceso educativo que tiene como objetivo dar a conocer en qué medida se han o no cumplido los objetivos planteados en el inicio de la gestión escolar, siendo que los instrumentos para verificar su cumplimiento o no, son la planificación, el seguimiento y la verificación. Además es importante la toma de decisiones.
Para muchos autores, la evaluación institucional es una investigación valorativa que se realiza en cada gestión escolar para poder obtener información sobre fortalezas y debilidades. En tal sentido, se debe hacer un profundo estudio de la realidad y de todas las características que se dan en el interior de una institución educativa, con la finalidad de definir qué es lo que se va hacer o cuáles acciones serán tomadas en cuenta para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje.
En la evaluación institucional todos los actores deben buscar el cumplimiento del clima institucional, dentro de un marco de respeto, por lo que no debe haber ni acusados ni acusadores, a la vez que de ninguno se debe mellar la dignidad. Además, ninguna maestra o maestro, personal administrativo u otro actor educativo debe ser juzgado por los padres o madres de familia de manera pública.
En la evaluación institucional se debe analizar si la institución educativa cumplió o no con sus objetivos planteados para llevar adelante el proceso de enseñanza aprendizaje en los niveles que son autorizados de acuerdo con los lineamientos del sistema educativo y al modelo educativo vigente y en función a la resolución ministerial de inicio de gestión escolar. Si se logró o no, si existe un trabajo coordinado, sistemático y conjunto, tomando en cuenta elementos como la comunicación efectiva, la resolución de conflictos. Y si cumplieron con las tareas delegadas, si se mejora la confianza y la autoestima de todos los actores educativos.
La evaluación institucional se la realiza en cuatro ámbitos: administrativo, pedagógico, relación con la comunidad y en infraestructura. Entonces en el ámbito administrativo se debe analizar si existe o no clima institucional, si cada uno cumple o no con los roles y funciones que tiene en la institución, si además se da la empatía y colaboración entre todos y son practicados los valores de puntualidad, responsabilidad y honestidad. En la parte pedagógica se analiza si se cumplió en cada nivel, año de escolaridad o paralelo, con los objetivos de los planes de estudio y con los perfiles de salida que fueron propuestos en el inicio de la gestión escolar. En qué medida se cumplieron con el avance de contenidos, qué reajustes fueron hechos sobre las estrategias metodológicas y en cuáles actualizaciones o innovaciones se participó, en qué medida se cumplió el Proyecto Sociocomunitario Productivo (PSP).
En el ámbito de relación con la comunidad, en qué medida participan y apoyan las actividades de las instituciones las diferentes autoridades y cuál es su compromiso para mejorar los procesos educativos. Finalmente, en el ámbito de infraestructura, se debe analizar en qué medida se hicieron mejoras en los espacios educativos o para la dotación de materiales como mobiliario, equipamiento, laboratorios, computadoras y otros. La evaluación institucional no debe quedar en la parte teórica y ser más práctica. Debe ser un compromiso e involucramiento de todos los actores del sector, para mejorar y llegar a la calidad educativa.
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