Manejo agresivo en La Paz

Antes de entrar al tema del manejo agresivo, es necesario recordar lo que es el manejo defensivo. En términos generales, “el Manejo Defensivo es una estrategia de conducción que tiene el objetivo de reducir los accidentes de tránsito y su impacto; consistente en conducir estando atento a los errores de los otros conductores para poder anticiparse y tomar decisiones que eviten algún incidente”, y contiene las siguientes recomendaciones:
Respetar el derecho de otros conductores y peatones, además de conocer sus propios derechos. Conocer y cumplir las normas de tránsito. Estar alerta y ser previsor. Saber controlar un vehículo. Ser receptivo. Acelerar y frenar adecuadamente. Indicar peligros o acciones. Respetar el espacio de los demás. Tener en cuenta las distancias de frenado. Ser paciente y ser cortés.
Pues, estas recomendaciones y otras obligaciones, están ausentes en la mayoría de los conductores paceños qué, en la última época, manifiestan su alta agresividad, por ejemplo, entre otros, tocando bocina desaforadamente al oído y ante la paciencia de los agentes de tránsito. (El ruido es el peor contaminante del medio ambiente “El ruido mata poquito a poco”). Las bruscas frenadas y aceleraciones violentas son visibles en cada instante. Es imposible dejar un prudente espaciamiento entre vehículo y vehículo porque inmediatamente se mete otro apurado conductor, causando peligro y malestar. El respeto al derecho del peatón, especialmente en una intersección, es poco frecuente (en los últimos 10 años han muerto varios miles de peatones).
Por otra parte, observamos la impaciencia de conductores y pasajeros, provocada por el cotidiano congestionamiento, por los constantes bloqueos y por la proliferación de rompemuelles. Todo ello está dañando severamente la salud de todos los que moramos en esta “Ciudad Maravilla”, donde la calidad de vida se deteriora cada día más y más.