Nuestro medio artístico cada vez es testigo del surgimiento de nuevos talentos muy jóvenes lo cual habla de la adecuada formación que en muchísimas ocasiones tienen las personas con espíritu artístico. Hoy en Cvltvral tenemos como invitado central a un virtuoso pianista cuyo amor por los pentagramas nace desde muy chico, incluso antes de saber escribir o leer él ya tocaba el piano, como nos cuenta en la presente exclusiva… sean todos bienvenidos al show.
¿Quién es Facundo?
Facundo es un joven que toca el piano y que trata de hacerlo de la mejor forma posible. Siempre intenta marcar alguna diferencia con esfuerzo y dedicación; toca el piano desde los 4 años y a sus 8 decidió dar más seriedad a sus estudios en la música; desde ese entonces participó en diferentes concursos y conciertos donde consiguió resultados muy positivos.
¿Qué aporta el arte a tu vida?
El arte es parte de mí, es la parte fundamental, ya que entorno a eso gira mi vida. Estudiar para un concierto o concurso, etc. es la forma en la que se hace presente el arte en mi vida, lo cual es casi todos los días.
¿Quién despertó tu interés en la música?
En casa había un piano que era de mi papá pero venía de otra generación, la de mis abuelos. Ellos eran grandes músicos que hasta ahora brillan, mi papá sabía tocar el piano y tal vez por eso nos inculcó la música a mi hermano y a mí. Tengo un hermano mayor, Santiago que actualmente realiza sus estudios musicales en Salzburg. Es así que entré al kinder “Bach” con la profesora Marlene Carrilo donde aprendo a tocar piano de una manera muy interesante. Era como un juego, era muy didáctico, cantábamos, bailábamos y tocaba el piano de una manera muy natural. Aprendí a tocar el piano antes que leer y escribir.
¿Cuál de tus maestros ha influido más en tu vocación musical?
A mis 8 ingresé al Conservatorio con la profesora Irina Efanova, quien no sólo me enseñó a ser pianista, sino a ser mejor persona. Me enseñó que los humanos tenemos una capacidad tan grande para hacer las cosas que no importa le edad que tenía ese tiempo; no sólo debía tocar bien el piano sino que puedo hacer sentir a través del piano muchas cosas, que al final eso es lo lindo del arte. En 2019 empecé a pasar clases con Carlos Tejada, que también fue alumno de Irina, con quien seguimos en ese camino de aprendizaje.
¿A qué le atribuyes ser un destacado músico siendo tan joven?
Creo que todos tenemos algo en qué identificarnos pero no basta con eso, pues para ser bueno en algo creo que hay que marcar la diferencia; la diferencia se marca con responsabilidad, esfuerzo y sacrificio. Y sí, probablemente esto ya se les hace familiar pero ponernos en ese plan y hacerlo, es la clave. En mi caso siempre trato de practicar a diario y mejor si es más tiempo. Al final es como cualquier profesión, solo que pienso que aquí, nunca se deja de aprender.
¿Qué ha sido lo más difícil de presentarte frente a un público grande en tus primeros años?
Encontrar un equilibrio entre lo musical y lo técnico con lo sentimental. O para que sea más entendible, tocar bien, en técnica, música y complementar con sentimiento y entrega. Y claro, el hecho de estar solo en un escenario, solo con el piano frente a todos, creo que a todos los artistas alguna vez nos ha pasado. También a veces es algo complicado llevar mi carrera musical con mi vida cotidiana. Por ejemplo con el colegio, muchas veces por practicar piano, no me doy tiempo, entonces tengo que quedarme unas horas más en la noche. Y como comentaba anteriormente, a veces la presión es un poco más de la normal.
¿Cuál es el escenario donde más disfrutas tocar?
En el centro Sinfónico tuve una linda experiencia. El 2018 teníamos nuestro concierto y se llenó, recuerdo que la fila para entrar daba vueltas la cuadra. También es muy lindo tocar en la Cancillería, ese piano creo que es el mejor de Bolivia.
¿Qué proyectos tienes para este 2023 que ya inicia?
Este año planeo irme a estudiar al exterior para poder continuar con mi sueño de ser pianista. Claro en el transcurso del mismo participaré en concursos y daré conciertos, quisiera tocar en diferentes lugares de Bolivia.
Checklist:
3 libros inolvidables:
Así habló Zaratustra
Vidas y Muertes de Sáenz
Y tú que sabes de William Arntz
3 discos insoslayables:
Evolve de Imagine Dragons
Let it be de The Beatles
Scriabin estudios de Op8
3 pianistas que más admiras:
Daniil Trifonov
Alexander Malofeev
Grigory Sokolov
3 cosas imprescindibles en la vida:
Música
Familia y amigos
Juegos y películas