Como familiar de un paciente inmovilizado, con un manejo no tan bueno, realizo el siguiente análisis, que podría coincidir o no con el caso del cocalero Apaza.
Debería adoptarse los siguientes “protocolos de manejo médico en Bolivia, para los pacientes inmovilizados”.
Resulta que cuando un paciente no se puede levantar de la cama, por diferentes causas (fracturas, coma, etc.), el peso del cuerpo, comprime ciertas regiones del cuerpo, como los talones, la región lumbar, las partes laterales de los muslos y es así que se producen las famosas “escaras”, que son heridas que en primera instancia pueden ingresar perforando la piel, luego ingresar y lesionar los músculos y, finalmente, llegar hasta los huesos, todo esto principalmente por descuido de los familiares, médicos, paramédicos y otros. Esto en la actualidad se resuelve mediante el volteo cada dos horas del paciente o el uso de un colchón de aire, al que podríamos llamar “un masajeador”, con un costo en La Paz-Bolivia de 600 bolivianos.
Por otro lado, al no moverse el paciente, las secreciones del pulmón no salen al exterior y pueden producirse neumonías, por eso el paciente debe ser sentado o realizársele masajes en el dorso.
Asimismo, como el paciente no se puede mover, a veces se le instala una sonda vesical, la cual, si no se hace el recambio respectivo en los tiempos pertinentes, puede lesionar gravemente la uretra.
Y si hablamos de las heces fecales que son eliminadas y acumuladas en un pañal, estas heces pueden causar lesiones en la piel, también produciendo heridas de difícil tratamiento.
Al no moverse el paciente, las articulaciones suelen quedar “anquilosadas”, vale decir que las rodillas, codos, cadera y otros, pueden quedar dobladas en ángulo, sin poderse poner rectas, es así que se necesita fisioterapia diaria, realizada por personal calificado.
Estas consideraciones las realizamos enfocadas en todos los pacientes inmovilizados, incluido el cocalero Apaza.
Por otra parte, si hablamos de la relación existente entre “la historia clínica” y “el paciente”, el paciente debería poder fotocopiar cada día las respectivas evoluciones de su estado de salud, En la actualidad vemos que las evoluciones, exámenes y otros (así lo dijo a la prensa la abogada de Apaza), son secreto de Estado, no pudiéndose enterar el paciente de su estado de salud hora a hora, minuto a minuto.
Para todo esto, también el paciente debe ser atendido, con una gran “empatía”, es así que el personal de salud debe ser minuciosamente interrogado para su contratación.
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