Oficialismo recurre a argumentos fantasiosos para encubrir la crisis

Sosteniendo que el Gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) recurre a argumentos fantasiosos para negar una realidad que toda la población está viviendo, la diputada por Comunidad Ciudadana (CC), Alejandra Camargo, cuestionó que autoridades traten de rechazar que el país se encuentra a las puertas de una grave crisis.
Desde sus redes sociales, la asambleísta cochabambina sostuvo que, en la actualidad, son varios los factores que ponen en evidencia las vulnerabilidades del modelo económico propuesto por el antes Ministro de Economía, Luis Arce, quien ahora debe saber admitirlos como presidente del país.
En este sentido, lamentó que en lugar de brindar una respuesta que pueda traer un poco de claridad para la población, el Movimiento al Socialismo recurrió a la “vieja confiable”: culpar al supuesto “golpe” de 2019.
“Algo que nosotros ya estamos viviendo hace varias semanas, y que el gobierno ha tratado de negar con argumentos fantasiosos, es que estamos a la puerta de una crisis económica”, afirmó Camargo.
En criterio de la legisladora de oposición, no se puede negar que la crisis política del 2019 tuvo un impacto en la economía, pero el gobierno no puede seguir ignorando y negando los problemas estructurales que han limitado el crecimiento del país durante décadas, mismos que el partido de gobierno no pudo solucionar en los 16 años que permanece en el poder.
“La falta de inversión en sectores productivos, la escandalosa corrupción que queda impune, el descarado despilfarro en monumentos al ego, y la falta de transparencia en la gestión de los recursos públicos son algunos de los factores que han contribuido a la crisis económica actual”, indicó.
En este contexto, apuntó como un aspecto de vital importancia el que desde el gobierno boliviano se asuma la responsabilidad por la situación y se tomen medidas concretas para enfrentar los desafíos que enfrenta el país.
Esto implicaría una reforma profunda del modelo económico, con una mayor diversificación productiva y una mayor transparencia en la gestión de los recursos públicos, además de tener la voluntad política de trabajar en conjunto con la oposición, y dejar de lado la persecución política y el discurso de odio.
“Ya no podemos seguir con excusas y deslindándonos de responsabilidades achacando las fallas a un supuesto golpe o a los gobiernos anteriores. Necesitamos certezas para sobrellevar estos duros momentos”.