Aprehenden a dueños de courier y alejan a jefes de BoA y Naabol

En medio del escándalo y las investigaciones del “narcovuelo”, el Ministerio Público aprehendió a otras dos personas, se trata de los dueños de la empresa de servicio de courier por el caso envío de un cargamento de 478 kilos de cocaína desde el aeropuerto Viru Viru en Santa Cruz a la terminal área de Barajas, España.
Los dos aprehendidos fueron identificados como Ronald C. y Maribel R., los que fueron detenidos y puestos a disposición de la justicia en el marco de las investigaciones por el caso “narcovuelo”.
Según reportes preliminares, ambas personas están involucradas en el envío de la carga de droga desde el aeropuerto de Viru Viru hasta Barajas, España.
Por su lado, María Belén Laguna, abogada de los acusados, en declaraciones a Unitel, aseguró que sus clientes solo enviaron ropa y que en este caso están tratando de involucrar a cualquier persona y no a los verdaderos responsables del hecho.
Entretanto, ejecutivos de la Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos (Naabol) y Boliviana de Aviación (BoA), instituciones involucradas en el envío de casi media tonelada de cocaína a España, determinaron desvincular a altos mandos regionales.
El gerente general de Naabol, Elmer Pozo, anunció que Joaquín Hurtado dejó el cargo de gerente regional en Santa Cruz “para que no entorpezca las investigaciones que se están realizando”.
Asimismo, el gerente general de BoA, Ronald Casso, informó que la estatal decidió “separar” al gerente regional, Carlos Moreno Méndez, para evitar obstáculos en las investigaciones.
Por otro lado, el diputado de Creemos, Erwin Bazán, sostuvo que el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico ha hecho público que el Gobierno conoció en febrero la salida de los 478 kilos de cocaína a España, por lo que fue “reprendido” por el ministro de Gobierno, le ordenó “que se calle”.
En este sentido, cuestionó las dudas generadas por el Estado Plurinacional de Bolivia acerca de su estrategia de lucha contra las drogas, hecho que se refleja en el marginamiento de organismos internacionales como Europol, la Policía Federal de Brasil, el Reino de España en las investigaciones y acciones antidroga.