Bolivia y su posición sobre la Mujer en los Foros Interamericanos

En los últimos años la presencia de la mujer es nula o escasa en los Foros o Cumbres Internacionales, esto queda atestiguado en las galerías fotográficas de las páginas oficiales o en las portadas de los medios que las cubren. Sin embargo, en la diplomacia boliviana el tema de la participación y los derechos de la Mujer, estuvo presente desde 1922.
Es necesario mencionar, que en dicho año se llevó a cabo en Baltimore (EEUU) la Primera Conferencia Panamericana de la Mujer, en la cual la delegada boliviana Arcadia Calderón de Zalles, se desenvolvió con perfecto acierto. También subrayamos, que esta reunión dio origen a la Asociación Panamericana para el Avance de la Mujer, que tenía por misión influir en la Quinta Conferencia Internacional Americana reunida en Santiago, en marzo de 1923.
Otro hecho a destacar, es la participación de Eduviges Garaizábal de Hertzog, quien, como fundadora del Ateneo Femenino de La Paz, fue delegada a la Primera Conferencia Interamericana de Mujeres, efectuada en Lima (Perú), en 1924. En la misma pronunció dos conferencias intituladas: “Ayuda a la mujer viuda y con hijos, que quedan sin fortuna” e “Igualdad de la mujer en el trabajo”, ponencias que fueron recopiladas en un folleto.
En la Sexta Conferencia Internacional Americana, celebrada en La Habana (Cuba), los delegados bolivianos José Antezana y Adolfo Costa du Rels, suscribieron en nombre de muestro país, las resoluciones “XXIII.- Licencia obligatoria a la mujer madre… XXVI.- Invitación a las Asociaciones de Mujeres para presentar sus puntos de vista relativos a los Derechos de la Mujer”. En esta oportunidad por primera vez las mujeres parlamentaron oficialmente en una sesión plenaria y como consecuencia se creó la ‘Comisión Interamericana de Mujeres’ (CIM), entidad que actualmente pervive y tiene por propósito estudiar sobre la condición jurídica de la mujer en las Américas.
En la Séptima Conferencia Internacional Americana, realizada en Montevideo (Uruguay) en diciembre de 1933, los delegados bolivianos Casto Rojas, David Alvéstegui y Arturo Pinto Escalier, firmaron la “Convención sobre la Mujer”, primer Instrumento Internacional del mundo sobre igualdad para la mujer.
En la Octava Conferencia Panamericana, la mujer boliviana estuvo representada por Etelvina Guachalla y Rosario de Sanz García. En esta ocasión de manera sui generis los delegados bolivianos suscribieron la “Declaración de Lima en favor de los Derechos de la Mujer”, “El mejoramiento de las condiciones de Vida de la Mujer Campesina”, “Congreso Interamericano de Mujeres”, “Labor de la Comisión Interamericana de Mujeres”, “La definición de agresor y sanciones”. Es importante señalar que en dicho Congreso las naciones americanas acordaron: “1.- Declarar que la mujer tiene derecho: a) a igualdad tratamiento político que el hombre; b) A gozar de igualdad en el orden civil; c) A las más amplias oportunidades y protección en el trabajo; y d) Al más amplio amparo como madre”.
Más adelante, la representante boliviana Ana Rosa Tornero de Bilbao la Vieja, desempeñó una interesante labor en el Primer Congreso Interamericano de Mujeres, celebrado en Guatemala entre el 19 al 27 de agosto de 1947.
Pero la posición más acertada sobre la posición de la mujer, fue la suscripción y ratificación de los “Derechos de la mujer en América”, aprobada en la Conferencia Interamericana sobre Problemas de la Guerra y de la Paz, celebrada en la ciudad de México en 1945 y la “Convención Interamericana sobre Concesión de los Derechos Políticos a la Mujer” y la “Convención Interamericana sobre Concesión de los Derechos Civiles a la Mujer”, ambas firmadas en la Novena Conferencia Internacional Americana, realizada en Bogotá (Colombia) en mayo de 1948. Muchos años después, nuestro país suscribió la “Convención Interamericana para Prevenir Sancionar y Erradicar la violencia contra la Mujer” y la ratificó el 26 de octubre de 1994.