La pandemia se propuso devastar a nuestras entidades privadas. Prueba de ello es que, durante la gestión de 2020, provocó el cierre de, aproximadamente, 300 industrias, según informó, a fines de ese año, la institución matriz que representa al sector.
Actualmente, debido a la arremetida del contrabando, muchas están en riesgo de desaparecer. Por consiguiente: el contrabando es una permanente y latente “amenaza a las 39.000 industrias de diferentes sectores económicos, así como a las más de 600 mil fuentes de trabajo”, según el asesor de la Cámara Nacional de Industria (CNI), Hugo Siles.
“El contrabando, recalcó, es un freno a la reactivación económica; tiene un impacto en la salud pública, los productos que traen de manera ilegal no respetan las normas, como la cadena de frio o las fechas de vencimiento; la actividad ilícita está asociada al incremento de la inseguridad interna; y provoca la desindustrialización” (1).
“En un país tan pobre como Bolivia, el cierre de la más pequeña fábrica debe alarmarnos, ya que significa retroceso en el campo de la economía y una limitación en la fuente de trabajo”, aseguraba, hace aproximadamente 36 años, EL DIARIO, Decano de la Prensa Nacional (2).
Por lo visto, instituciones de reconocida trayectoria, y algunos sectores políticos, conscientes de esa realidad y comprometidos con el curso de la historia, buscaron, por todos los medios posibles, preservarlas, pensando, básicamente, en la construcción de un futuro llevadero para quienes vienen, en particular. Priorizando el bienestar social, como el supremo objetivo. Promoviendo, posiblemente, el ideal relativo a un país desarrollado y competitivo.
El cierre, hasta solo de una de ellas, significaría desempleo y frustración, con enorme incidencia en el crecimiento del comercio informal o la competencia desleal a la actividad formal. Sería un paso regresivo, que anularía las aspiraciones de mejores días, de amplios sectores sociales. De quienes viven preocupados por la subida del precio de la canasta familiar. “A pesar de que la información del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestra cifras bajas de inflación, el costo de los alimentos subió 6% a agosto de la presente gestión”, dijo el economista y docente universitario, Gonzalo Chávez (3).
En un país que no está ideologizado ni sometido a la arbitrariedad de quienes detentan el Poder, las entidades privadas siempre tienden a promover bienestar para la ciudadanía. No sOlo ello, sino, fundamentalmente, progreso, acorde con el tiempo actual. En ese contexto es urgente que se ratifique el principio de seguridad jurídica, para garantizar las actividades de aquellas, en una convivencia de paz, entendimiento y respeto, que tanta falta hace en democracia.
En suma: las entidades privadas generan empleo, por el bien común.
NOTAS
(1) “Contrabando afecta en más de $us 900 millones al Estado”. EL DIARIO, La Paz – Bolivia, 20 de septiembre de 2023.
(2) “1987: Reactivación económica”. EL DIARIO, 8 de enero de 1987.
(3) “Una inflación baja que no refleja la realidad, costo de los alimentos sube en 6% en agosto”. EL DIARIO, 29de septiembre de 2023.