En la gestión 2023, se graduaron 746 bachilleres privados de libertad en los diferentes centros penitenciarios del país. La dirección general de Régimen Penitenciario anunció que realiza alianzas con universidades públicas para gestionar oportunidades y que los bachilleres puedan estudiar una carrera académica.
El director de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias, hizo el anuncio el pasado fin de semana durante la ceremonia de graduación de 12 privados de libertad que concluyeron sus estudios en el centro de educación alternativa, Ana María Romero de Campero, perteneciente al centro de rehabilitación para jóvenes Qalahuma.
“Es un inicio, un primer objetivo vencido, vienen muchos objetivos y estoy seguro que lo van a seguir venciendo paso a paso. La próxima vendremos a las graduaciones de los que queden porque seguramente no todos van a quedar, otros ya se irán. Lo bueno es que saliendo van a continuar sus estudios”, dijo el director de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias.
Este esfuerzo de la institución busca permitir que la población penitenciaria continúe sus estudios a nivel de licenciatura con el objetivo de que continúen su proceso de rehabilitación y puedan reintegrarse a la sociedad como personas de bien.
Según el reporte de Régimen Penitenciario, en la gestión 2023 se graduarán 746 bachilleres privados de libertad, junto con más de 10 mil internos a nivel técnico. Además, 285 personas en centros penitenciarios de toda Bolivia cursan estudios de primaria y secundaria, sumando un total de más de 13.700 privados de libertad que se forman académicamente.
“Lo bueno dentro de las noticias para nuestros bachilleres (es que) con el director departamental, hace unos días celebramos el Día Internacional de los Derechos Humanos el 10 de diciembre en la Asamblea Legislativa donde nos encontramos con el rector de la Upea. Hay un compromiso del rector de traer la educación universitaria aquí, a Qalahuma”, enfatizó Limpias.