Nuestra historia marítima y fluvial

Nuestro país tiene una rica historia marítima y fluvial que abarca desde la llegada del primer vapor, registrado en el puerto de Cobija; la fundación de compañías navieras bajo el auspicio o consentimiento del Estado boliviano y, por último, la utilización del pabellón en altamar.
Sobre el primer tema, rescatamos la figura del vapor de ruedas denominado ‘Perú’, que arribó de manera triunfal a dicho puerto el 20 de octubre de 1840. Comandado por el capitán Mr. W. J. Peacock, la nave de 700 toneladas tenía capacidad para 150 pasajeros.
Su llegada, sin duda, fue todo un acontecimiento, ya que dicha embarcación no tenía velamen, echaba mucho humo y avanzaba sola. En consecuencia, su introducción, acortó las distancias y el intercambio de mercaderías fue más fluido, doce años después se hundió en las costas chilenas.
Otro hito destacable de este periodo fue que el comerciante francés Luciano Durandeau fue el primer consignatario de vapores en Cobija.
Sin duda la constitución de compañías navieras representa también un tema esencial de la historia marítima de Bolivia y, en esta oportunidad, recordamos al estadounidense William Wheelwright, quien fundó en Cobija la ‘Pacific Steam Navigation Company’ o también conocida como ‘Compañía Inglesa de Navegación en el Pacífico’, primera empresa naviera que utilizó vapores en el Pacífico. De ésta se desprendió la Goleta ‘4 de Julio’, registrada en el puerto de Cobija como parte de la marina mercante de Bolivia.
Llegado a este punto, conviene mencionar a la ‘The National Bolivian Navigation Company’, organizada en la ciudad de Nueva York (EEUU), el 30 de junio de 1870. Esta empresa tuvo por objeto navegar los ríos bolivianos, afluentes del Madera y la canalización de las cachuelas, además del establecimiento de un ferrocarril. Posteriormente, el cruceño Juan Francisco Velarde, en Londres adquirió el primer barco a vapor que cruzó los ríos orientales, ‘El Explorador’, navegando en él desde Liverpool.
Sobre la matriculación del uso de pabellón antes de la Guerra del Pacífico, muchos pailebotes y goletas fueron registrados en diversos puertos bajo bandera boliviana y empadronados en los Consulados Generales, como por ejemplo en el Consulado de Bolivia en Buenos Aires, entre marzo de 1877 a julio de 1878, destacan: la ‘Reina del Plata’ de 32 toneladas; pailebote ‘Lombardo’ de 52 toneladas; goleta ‘Icevola’ de 41 toneladas; goleta ‘Capital de Bolivia’ de 23 toneladas; goleta ‘Nueva Colomba’ de 49 toneladas; goleta ‘María Teresa’ de 20 toneladas y goleta italiana ‘Rinaldo’ de 33 toneladas, entre otras.
En este recuento también recordamos la hazaña realizada por el Vapor ‘Presidente Saavedra’, primera embarcación con bandera boliviana que cruzó el Atlántico, en 1926.