Oruro rinde homenaje a sus 243 años de su grito libertario

Hoy, 10 de febrero, se conmemora el 243 aniversario de uno de los gritos libertarios más gloriosos de América, la Revolución de Oruro, cuando en las calles de esa ciudad, se inició en 1781 el proceso emancipador que culminaría años después con la creación de la República de Bolivia.
En esta memorable fecha estalló la revolución contra la tiranía colonial, encabezada por don Sebastián Pagador, los Menacho y otros patriotas, los hermanos Juan de Dios y Jacinto Rodríguez fueron los cerebros de la rebelión.
De acuerdo con la historia, fue en la Villa Real de San Felipe de Austria, conocida como la ciudad de Oruro en la actualidad, que se produjo uno de los primeros gritos libertarios de América Latina, un de los episodios heroicos más recordados contra la corona española.
El pueblo que vivía agobiado por las obligaciones tributarias, los abusos de las autoridades españolas y la decadencia minera, aprovechó esta situación y el 10 de febrero de 1781, salió enardecido a las calles ante el repique de las campanas de las iglesias y por la noche –en medio de la confusión–, grupos exaltados asaltaron e incendiaron las residencias de los españolas, quienes buscaron refugio en el templo de La Merced y otros murieron.
En este contexto, Sebastián Pagador emite la siguiente proclama: “Amigos paisanos y compañeros; en ninguna ocasión podemos dar mejores pruebas de nuestro amor a la patria, sino en ésta. No estimemos en nada nuestras vidas, sacrifiquémosla gustosos en defensa de la libertad; convirtiendo toda la humildad y rendimiento que hemos tenido con los españoles europeos en ira y furor…”.
La raíz de la rebelión orureña, fue impulsada por importantes acontecimientos registrados a comienzos de 1781, ya que hubo incontenibles levantamientos indígenas contra la corona española en diferentes regiones del Perú, la mayoría tuvo carácter antifiscal, movida por una férrea oposición contra los abusos impositivos, entonces conocidos como tributos, entre ellas estuvo la rebelión liderada por Túpac Amaru en el Alto Perú. Oruro, una importante ciudad minera en ese entonces, aunque afectada por la baja producción de sus minerales, no quedó indiferente a estos movimientos emancipadores.
La Rebelión de Oruro tuvo lugar en esta región del Alto Perú, hoy Bolivia, contra los españoles el 10 de febrero de 1781 a causa de la rivalidad que había en la villa entre los europeos, por un lado, los criollos y mestizos por el otro. El año de la rebelión, el Corregimiento de Oruro formaba parte de la Provincia de Charcas, dentro del Virreinato del Río de la Plata. ​
Para algunos sectores de la historiografía independentista hispanoamericana, este acontecimiento es señalado como el “Primer Grito Libertario de América”, lo cual es disputado por quienes sostienen que el nombre corresponde a la revolución de Chuquisaca de 1809.
Es innegable la dimensión histórica de esta ciudad, antes tierra de los Urus, de ahí el nombre de Oruro explican algunos historiadores y cuyo carnaval fue declarado por la Unesco, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad en el 2001, de ahí que se la conoce como capital del folklore boliviano.
En la actualidad, Oruro y sus alrededores son uno de los destinos turísticos más importantes del país y el espíritu de sus habitantes parece proyectar esa región, como un ejemplo de convivencia y adaptación histórica.