Luego de un año y ocho meses el avión de la empresa Emtrasur Cargo, retenido en Ezeiza por orden judicial desde junio 2022, alzó vuelo ayer por la madrugada con ruta de vuelo hacía Estados Unidos.
Lo reclamó la justicia de ese país que solicitó su decomiso en Argentina, por supuestos usos con fines terroristas. El gobierno ‘chavista’ lo había comprado a la Maham Air, empresa iraní objeto de embargos en Estados Unidos. Desde el decomiso, se inició una extensa investigación en medio de roces diplomáticos y su tripulación finalmente pudo dejar Argentina el año pasado. La misma consistía en14 venezolanos y 5 iraníes, «los numerosos y misteriosos tripulantes de la aeronave, cuyo objetivo en esta zona nunca se esclareció», cita Clarin, de Argentina.
A principios de este año, un juez argentino aprobó el decomiso del avión de carga venezolano a pedido de Estados Unidos, informó entonces el Ministerio de Justicia, en una decisión que fue calificada por Caracas como un «robo».
El juez federal Federico Villena resolvió «el mantenimiento y aseguramiento del avión, la custodia del avión, que el avión se ponga en condiciones y el decomiso definitivo a favor de la justicia de los Estados Unidos», confirmaron fuentes del ministerio a la AFP.
El Boeing 747 permanecía retenido en Argentina desde el 8 de junio de 2022 tras llegar de México con un cargamento de piezas automotrices. Los 19 miembros de la tripulación fueron entonces detenidos, aunque posteriormente liberados.
Entre los tripulantes había cuatro iraníes, uno de los cuales, según Estados Unidos, era un antiguo comandante de los Guardianes de la Revolución, organización considerada como terrorista por ese país.
Poco después de conocido el fallo, el gobierno venezolano denunció la decisión de enviar el avión a Estados Unidos como un intento por «consumar el robo de la aeronave venezolana».
Venezuela «rechaza y condena de manera categórica la decisión, a todas luces, servil a intereses imperiales», del juez Villena, escribió el ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela en la red social X.
El avión fue vendido en octubre de 2021 a la Empresa de Transporte Aerocargo del Sur (Emtrasur) por la compañía iraní Mahan Air, en violación de las sanciones estadounidenses, argumentó el 19 de julio de 2022 el Departamento de Justicia de EEUU para justificar su petición de incautación.
«Venezuela demostró, ante todas las instancias jurídicas y políticas internacionales, la posesión legal y legítima de la referida aeronave», señaló a su vez la cancillería venezolana. (Mundo)