La División de Cibercrimen de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) advirtió a la población sobre la creciente ola de estafas mediante redes sociales, entre ellas WhatsApp, en la que delincuentes digitales logran acceder a los contactos para ofertar dólares o pedir supuestas ayudas económicas.
Mediante un hackeo (pirateo, ataque informático) de la red social, los delincuentes acceden al directorio personal de la víctima, y se hacen pasar por parientes o incluso familiares, pidiendo ayuda económica mediante depósitos o transferencias bancarias.
La fuerza anticrimen informó que diariamente se reciben de dos a tres denuncias por este delito en la unidad Cibercrimen, destinada a atender este tipo de casos.
Efectivos de la Felcc manifestaron que el contacto inicial se realiza de un número con código internacional y una fotografía falsa. Los delincuentes inducen a la víctima a que proporcione un código de verificación de su cuenta de WhatsApp.
En caso de obtenerlo, esto les permite iniciar sesión en otros dispositivos. Luego, “escriben a los contactos más cercanos ofertando la venta de dólares o pidiendo ayuda, y así es que se tipifica el delito de estafa”, sostuvo uno de los efectivos de la fuerza anticrimen.
Los montos de las estafas pueden oscilar entre los 900 hasta los 35.000 bolivianos, dependiendo del tipo de “señuelo” que se utilice, según un reporte de Red Uno.
La Felcc recalcó que continúan realizando contactos por WhatsApp para la recuperación y análisis de los dispositivos móviles afectados, con el fin de dar con el paradero de los estafadores.
MODUS OPERANDI
Los efectivos especializados mencionaron que los delincuentes operan bajo diferentes formas de captar la confianza y la buena fe de las víctimas.
Por ejemplo, suelen pedir ayuda a los contactos más cercanos usando una “modalidad de ayuda solidaria”, fingiendo que están en problemas económicos.
De esta manera, “proceden a engañar para ganarse la confianza y recibir estos montos, enviando un (código) QR de una tercera persona que no es el titular”, indicó un funcionario al medio televisivo.
El código QR consiste en un gráfico generado automáticamente que sirve como enlace directo a una página web, base de datos o cuenta bancaria. Es usado frecuentemente para transferencias digitales sin la necesidad de efectuar transacciones con efectivo.
CÓDIGO DE
VERIFICACIÓN
Con el fin de evitar caer en estos delitos, Cibercrimen recalcó su recomendación a la población de no proporcionar el código de verificación a ninguna persona desconocida, así como de evitar responder mensajes y llamadas de números desconocidos.
El código de verificación es un método de seguridad de aplicaciones, como WhatsApp que permiten verificar la identidad de la persona al momento de iniciar sesión en un dispositivo.
Cada vez que una persona accede a su cuenta en un dispositivo por primera vez, un código numérico de cuatro o seis dígitos llega al teléfono móvil registrado. Al ingresarlo a la red social, se corrobora que el titular es quien desea acceder a la cuenta.
En otras palabras, proporcionar este código a terceras personas significa permitirles que accedan a todas las conversaciones, archivos e información compartida desde un dispositivo remoto, por lo cual no debe ser compartido.