El investigador de la Fundación Solón, José Carlos Solón, señaló que el proceso de industrialización de litio en Bolivia sufrió un “grave problema”, debido al cambio abrupto de estrategia. “El gobierno de Evo Morales apostó por las “piscinas de evaporación”, en tanto que Luis Arce se concentró más en la “Extracción Directa de Litio EDL”.
Señaló que el gobierno de Evo Morales apostó por las “piscinas de evaporación”, en tanto que Luis Arce se concentró más en la “Extracción Directa de Litio EDL”.
Recordó que en la Fundación Solón notaron que el proyecto de Morales tenía deficiencias, y cuando Arce se puso al frente del Gobierno decidió continuar con ambos proyectos de piscinas y EDL.
“El Gobierno decide decir lo mismo sin dar la estocada clara, las piscinas no funcionan por eso vamos a ir a EDL”, aseveró.
También mencionó que en el gobierno de Morales se inició el proyecto de la planta industrial de carbonato de litio, pero recién fue inaugurada en diciembre del 2023, en el gobierno de Luis Arce.
“¿Por qué si el gobierno sabe que las piscinas de evaporación no sirven, siguen apostando en la planta industrial de carbonato de litio?”, se preguntó el investigador y agregó que “es como tener una casa sin cañerías”.
De acuerdo con los actuales responsables YLB la construcción y puesta en marcha de la planta industrial de carbonato de litio en Llipi, tuvo varios contratiempos en su ejecución, como las fallas en el trabajo de impermeabilización de las piscinas, y moras en los plazos de entrega. La obra planificada con una capacidad de 15 mil toneladas debía entregarse a fines de 2019, pero después de tres años el proyecto no concluye.
Otro de los problemas es el diseño de las piscinas de evaporación para extraer litio, una tecnología que —como advirtieron varios analistas— no dio los resultados esperados. El Gobierno dijo que con las piscinas no se podrá cumplir la meta de producir carbonato de litio a nivel industrial para 2025, por lo que se apuesta ahora por la tecnología EDL.