El último ciclo del MAS, marca el final de una época en la triste historia de Bolivia. Todo el país califica la corrupción presidencial como inconcebible y maldita, nos hemos quedado todos tan impresionados, confusos y apenados, que ya casi ni sabemos dónde estamos. El gobierno del presidente Arce comete atrocidades dignas de ser consideradas como corrupción. El “ala evista” y grupos de oposición, expresaron su total rechazo al Decreto Supremo 5.143, pues consideran que es inconstitucional y representa una amenaza para la propiedad privada en el país. Ante esta situación, han sido anunciadas movilizaciones con el objetivo de lograr su abrogación. Es decir, estos grupos antagónicos se unen en contra de esta norma polémica 5.143, por lo que aquí está sucediendo algo muy raro, pero en política todo es posible. El objetivo es otro, este es solo un pretexto político para desatar los más deplorables actos de corrupción política.
Muchos sectores amenazan con movilizaciones, si es que no es abrogado este decreto supremo. El 18 de mayo los “evistas”, definirán acciones contra el ala “arcista”. Al parecer todo esta fríamente calculado en cuanto a los tiempos políticos, el TSE en 10 días dará su palabra sobre la supervisión al congreso “arcista”.
Esto huele a peligro, al parecer el ex presidente Evo Morales está tocando todas las teclas posibles con el objetivo de salirse con la suya, el único camino que le queda es la confrontación y al parecer los partidos políticos tradicionales de oposición le están siguiendo el juego. Seguramente Quintana y otros agitadores políticos afines al ex mandatario desean decesos y bajas en el conflicto que están armando estratégicamente para convulsionar y desestabilizar el gobierno del presidente Arce, que cada vez más con sus desatinos y malos cálculos, él solito se está poniendo en la cuerda floja. Y la crisis económica que estamos viviendo es el perfecto caldo de cultivo.
La política es el arte de lo posible y de lo imposible, por lo que todo indica que los “evistas”, en contubernio con los partidos tradicionales de oposición, están optando por la empresa política de la conspiración. Según cálculos, ellos piensan que puede ser más fácil concretarla. Es la última carta que tiene el ex mandatario para volver al poder. Si todo sucede según sus planes, por sucesión constitucional Andrónico Rodríguez se quedaría como presidente, ya que en este país se obliga a las personas a renunciar, aunque estén en la línea sucesoria, solo para satisfacer apetitos personales de poder. Rodríguez es el as que tiene Morales debajo de la manga para retornar al poder. Y para lograr este objetivo, los partidos políticos tradicionales de oposición serán utilizados, claro, seguramente habrá un acuerdo político por detrás, para repartirse la torta del poder, ya lo hicieron mediante el pacto político, con la oposición de “derecha” en la Asamblea legislativa Plurinacional, para ganar la presidencia de la Cámara de Senadores. No olvidemos que Andrónico Rodríguez representa el poder del chapare y del ex mandatario en el estado actual de cosas; a cambio de eso, los “evistas” comprometieron unas primarias abiertas. No se puede negociar ni pactar con la mafia. No puedes seguir la hoja de ruta crítica que te marca el enemigo, porque tarde o temprano caerás en la trampa. Abran los ojos, cuidado sea demasiado tarde.
Bolivia, uno de los países más ricos en recursos naturales, se hundió en el narcotráfico hace décadas, bajo el dominio de diferentes presidentes y se convirtió en el paraíso de la corrupción gubernamental. Seguramente el poder del narcotráfico utilizará todas las armas posibles para lograr el objetivo de hacer volver al ex mandatario a la silla presidencial nuevamente. Imagino el dinero que circulará en las futuras movilizaciones que anuncia Morales, todo bajo la supervisión de los “capos” y “peces gordos” del narcotráfico continental. Todos ellos saben el camino del dinero, de la corrupción que desvía nuestro destino. La conspiración del crimen organizado internacional contra el pueblo boliviano es grande.
El oscuro ex presidente, ha sometido a nuestro país a horrores y lágrimas por culpa del narcotráfico. Recordemos que su guerra contra la corrupción fue un reverendo fracaso y la corrupción y la ineficiencia gubernamental del presidente Arce siguen triunfantes a lo largo y ancho de todo el país, pues nuestras riquezas naturales, las tierras ricas, ya fueron vendidas a empresas chinas. Bolivia está dominada por el abuso de poder despótico. Tanto “arcistas” como “evistas” representan lo mismo, esa “elite masista” que sigue gozando de privilegios y algunos se tratan como “príncipes”, poniéndose las camisetas de futbol del “Imperio colonialista”, todo gracias al saqueo de tantos recursos económicos como naturales. Todos ellos han adquirido un master y hasta doctorado en la Administración de la corrupción, todos son distinguidos y aplicados en todas las artes del contrabando, del narcotráfico y del tráfico de tierras y de personas para beneficio personal. “Bienvenidos a la Universidad del Crimen”.
El ex mandatario sabe cómo aprovechar los acontecimientos, no porque sea inteligente, sino porque sus asesores cubanos saben cómo Balcanizar el país, desmembrar el país en territorios y regiones, aceptando las situaciones tal y como vienen, siguiendo claramente el objetivo que es destruir la nación boliviana. Por ello se amoldará a las circunstancias, pactará con la supuesta “derecha” si es preciso, para utilizarlas, al prometerles repartirse la torta del poder. La ruina de Bolivia se confirma, la clase política se ha convertido en el nido de los peores crímenes; la perversión es contagiosa y políticos de oposición asimilaron muy bien el sistema corrupto. Para defender este sistema corrupto todos ellos están obligados a recurrir a incontables inmoralidades, con el fin de preservar el mismo sistema corrupto de siempre, todo sobre la base de mentiras y traiciones a la Patria.
Jhonny Vargas es Politólogo y Docente de Postgrado.