Los anuncios de bloqueos afectan a la economía nacional

El presidente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (Fepsc), Oscar Mario Justiniano, rechazó los anuncios de bloqueo y manifestaciones por parte de algunos sectores políticos y sociales, porque -afirmó- no contribuyen a la economía ni a generar empleo, que es lo que requiere Bolivia.
“Desde el sector privado siempre hemos manifestado que tenemos la predisposición, la necesidad y la esperanza de hacer negocios, para generar empleo formal y digno, pero necesitamos trabajar en conjunto y teniendo claro, como bolivianos, que no es con bloqueos, manifestaciones ni marchas que vamos a generar más empleo”, consideró.
Un sector de los gremiales inició el viernes una serie de marchas reclamando solución a la falta de dólares y exigiendo la abrogación del 4732 de junio de 2022, que precautela los derechos de las usuarias y usuarios interesados en la compra de inmuebles de empresas constructoras, así también el retiro del proyecto de ley 145, presentado por el senador “evista” Felix Ajpi, para ampliar las labores de la Aduana.
El dirigente del Transporte Pesado, Domingo Ramos, también anunció que desde las cero horas de mañana comenzarán los bloqueos de carreteras en siete departamentos del país, entre ellos, Oruro, La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, Chuquisaca, Tarija y Potosí, por la escasez del dólar, temas impositivos y otros.
Por otro lado, los seguidores de Evo Morales se reunieron ayer en Cochabamba y no descartaron asumir medidas de presión con miras a garantizar la postulación del expresidente en las elecciones generales de 2025.
La diputada “evista”, Gladys Quispe, afirmó que las “organizaciones sociales desde hace tiempo han venido exigiendo que se lleven adelante medidas de presión, incluso el tema de bloqueos”, en consonancia con las amenazas del propio Morales.
Ante esas amenazas, Justiniano afirmó que para “Bolivia, claramente, no es una opción seguir en bloqueos, manifestaciones y protestas; porque no van a hacer que aparezcan los dólares por obra y gracia del Espíritu Santo”.
Insistió en la necesidad de trabajar, “poniendo, lógicamente, metas”.
“Siempre hemos tenido claro que la única forma de salir de estas situaciones complejas es teniendo la capacidad de sentarse a conversar, proponer y, por supuesto, llegar a tener visiones en conjunto con el Gobierno nacional y el sector empresarial, con el único objetivo de salir adelante”, afirmó.
La cotización de la divisa en el mercado paralelo bordea los 8,60 bolivianos por dólar, la gente debe comprar, pues tiene que honrar compromisos con empresas extranjeras o, en el caso de los industriales, comprar materia prima para evitar parar la producción.
Lo cierto es que todos los sectores económicos de Bolivia sienten la falta de la divisa estadounidense y deben acudir a otros mecanismos para obtener la moneda extranjera para cubrir sus necesidades económicas.