miércoles, julio 24, 2024
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El empleo en minería

Hasta antes de la nacionalización de las minas de la Gran Minería (Simón Patiño, Mauricio Hochschild y Carlos Víctor Aramayo) realizada el 31 de octubre de 1952, para formar la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), la minería era enteramente privada. Además de la Gran Minería existían miles de mineros chicos y en 1939 se formó la primera cooperativa con personería jurídica, denominada Kajchas Libres y Palliris. Durante la presidencia de Hernán Siles Zuazo, mediante la promulgación del Decreto Ley (DL) 5.035 de 13/09/1958, llamado Ley General de Sociedades Cooperativas, se legaliza la conformación de cooperativas mineras, mediante el otorgamiento de Personería Jurídica. Las primeras cooperativas auríferas mineras se formaron en 1958, dentro de la concesión Tipuani-Tora que perteneció a la Aramayo Mines, en la provincia Larecaja del Departamento de La Paz.
Posteriormente, por el cierre de minas de Comibol se fueron formando varias cooperativas, como en Pulacayo en 1959, Kami en 1962 y Bolsa Negra en 1963. El derrumbe del precio del estaño en octubre de 1985 ocasionó el cierre de casi todas las minas de Comibol y el tremendo aumento del número de cooperativas. Actualmente existen cooperativas en todas sus minas, incluyendo las que están dadas en contrato a empresas privadas. No se tienen registros del empleo en cada época de cada uno de los sectores, pero se estima que la Gran Minería tenía unos 24.000 trabajadores (incluyendo el personal administrativo). Posteriormente el fuerte e inusitado incremento gradual del precio del oro desde 2006, disparó en grado superlativo el número de cooperativas auríferas.
La Asociación Nacional de Mineros Medianos (ANMM) se fundó el 29 de mayo de 1939. La ANMM tuvo un receso entre 1953 y 1955 debido a la creación de la Cámara Nacional de Minería en 1953 que pretendía aglutinar a mineros chicos y medianos, que tenían criterios diferentes, de modo que continuó la ANMM. No tuvo cambios muy drásticos en su personal. De 8.200 trabajadores en 1978 bajó a 5.786 en 2021. Entre 2011 y 2021 tuvo un promedio de 5.188 trabajadores.
Una vez creada Comibol en 1952, con 28.973 trabajadores, subió hasta 35.660 en 1956. La incorporación de gran parte de ellos fue por razones políticas y la mayor parte trabajó en superficie. Por sus pérdidas económicas y la aplicación del Plan Triangular bajó el personal hasta 20.656 en 1969, pero volvió a subir hasta 27.746 en 1983, debido al incremento del precio del estaño desde 1974 hasta 1985. Por el cierre de minas bajó a 7.500 en 1986. Entre 2000 y 2005, en que dejó de ser operadora, tenía 17 empleados. En 2006 volvió a ser operadora. Llegó a un máximo de 8.072 trabajadores en 2014. Entre 2011 y 2021 tuvo en promedio 6.820 trabajadores.
La Minería Chica sufrió una fuerte disminución en el número de sus trabajadores. De 16.663 trabajadores en 1983 bajó a 2.086 en 2021. Entre 2011 y 2021 tuvo en promedio 2.014 trabajadores.
Las cooperativas tuvieron un aumento explosivo de cooperativistas, de 21.000 en 1981, aumentaron a 129.410 en 2021 y siguen aumentando. Además, no se cuentan los trabajadores que contratan para realizar diversas labores. Entre 2011 y 2021 los diferentes sectores tuvieron estos promedios:

1) Comibol 6.820 trabajadores, 5,1%.
2) Minería Mediana, 5.188 trabajadores, 3,9%.
3) Minería Chica, 2.014 trabajadores, 1,5%.
4) Minería Cooperativa, 118.718 cooperativistas, 89,5%.
5) Total, 132.740 trabajadores, 100,0%.

Como se aprecia, el sector cooperativo es de lejos el mayor empleador del país (casi 90% del empleo minero), lo que le da un poder social y político bien aprovechado, para obtener del gobierno entre otras, ventajas tributarias. El elevado precio de los metales les da también a los cooperativistas un alto poder económico, especialmente a los cooperativistas auríferos. Comibol, otrora el mayor empleador minero, con dirigentes de alta formación sindical y política, que constituían la vanguardia del proletariado y por ello el ejecutivo máximo de la COB debía necesariamente ser del sector minero, medida que se mantiene, pero que debería ser revisada por lo que representa ahora, tanto por su número (5% del empleo minero) como por la calidad y capacidad de sus dirigentes. La economía de Comibol y su capacidad tributaria dependen de los precios de los metales.
Merece mención aparte la mina más grande de Comibol, Catavi, con 5.000 trabajadores y formadora de grandes dirigentes como Juan Lechín, Federico Escóbar, Filemón Escóbar, Irineo Pimentel y muchos otros. Según René Zavaleta, había que entender qué pasaba en Catavi, pues eso es lo que iba a ocurrir en el país. Carlos Toranzo dice que “fue el centro de Bolivia por muchos años, la economía y la política sucedían allí”. Cerró en 1986 por sus elevados costos de producción y el derrumbe del precio del estaño en 1985.
El aporte de producción y exportación y especialmente por tributos de la Minería Mediana, que representa solo casi el 4% del empleo en minería, por su productividad es de lejos el más importante para las arcas del país. La Minería Chica (1,5% del empleo minero), está muy venida a menos desde hace mucho tiempo.

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