Un nuevo caso de presunto feminicidio consterna a la población boliviana, en el que una mujer de 25 años que trabajaba como taxista para mantener a sus dos hijos fue encontrada sin vida y colgada de un árbol; el exmarido fue señalado como el principal sospechoso de cometer el crimen, pues así no pagaría siete años de asistencia familiar.
Aunque a primera vista todo parecía indicar que la joven madre se había quitado la vida, un par de detalles dejaron entrever indicios de un posible feminicidio: tenía una herida en la nariz y el rostro con manchas de sangre, como si hubiese sido golpeada antes de ser ahorcada. De confirmarse, este será el séptimo caso en Cochabamba y el 37º en el país en el 2024.
El hecho ocurrió en la zona de Rodeo, en Melga, provincia Sacaba, el pasado martes 3 de junio, a solo días de que la víctima cumpliera 25 años. Jhoselin C. R. y José Ch. Q. se casaron y tuvieron a sus dos hijas, sin embargo, apenas nació la segunda él la abandonó. El exmarido le mandó dos meses de pensiones y luego desapareció de su vida, hasta que se enteró que había caído preso en Chile por narcotráfico. Ahora es buscado por la Policía tras ser el principal sospechoso del supuesto crimen.
De acuerdo con la declaración de una familiar, las niñas comentaron que un día antes se encontraron con su padre durante un paseo, llevándose un susto cuando éste tuvo la intención de golpear a Jhoselin, quien habría evadido hablar del tema cuando le preguntaron sobre el suceso. “Parece que no me quería avisar, solo me dijo que su exmarido estaba en camino y le llamaban de un número privado”, afirmó.
Otra familiar corroboró la versión al relatar que Jhoselin le confió a una allegada que, en el encuentro con el sujeto, ella reclamó por todas las pensiones adeudadas en siete años, a lo que él la había amenazado con “hacerle algo”.
El lunes 3 de junio, la última persona que vio con vida a Jhoselin fue su madre, Eusebia R., quien la despidió alrededor de las 14:00 para que pueda realizar sus labores al volante. Al día siguiente, la llamaron de la empresa de transporte para avisarle que encontraron a su hija muerta y que su auto fue abandonado.
EN BUSCA DE JUSTICIA
Incluso después de encontrar a la joven madre sin vida, los familiares y el novio recibieron mensajes de su teléfono móvil donde ella explicaba que supuestamente iba a viajar a Argentina a trabajar porque estaba embarazada. Ante tales incongruencias, la familia sospecha que el exmarido está implicado en el feminicidio para así no tener que pagar siete años de asistencia familiar.
La Policía y la Fiscalía iniciaron una investigación. La autopsia de ley confirmó que el ahorcamiento fue la causa de muerte, por lo que sus familiares trasladaron sus restos hasta Rodeo para el velorio. Asimismo, pidieron apoyo legal al Observatorio de Justicia de la Fundación Voces Libres, donde un abogado asumió la defensa legal en busca de justicia. (Con información de Voces Libres)