Will Smith y Martin Lawrence- los chicos malos de la comedia de acción- han vuelto para Bad Boys: Hasta la Muerte. “Verlos juntos es mágico”, dice Bilall Fallah, quien dirige junto con su socio Adil El Arbi. El dúo es mejor conocido simplemente como Adil & Bilall. “La química entre ellos tiene que verse para creerse. Resulta siempre sorprendente cuando estás detrás de los monitores dirigiendo una escena y a ellos se les ocurre desplegar ese genial humor de oro- te sientas, te relajas y les ves actuar”. Cuando esta magia acontece, el trabajo del director resulta de lo más sencillo. “Son el mejor dúo de la pantalla grande. Son algo único”.
Smith comenta que su química con Lawrence proviene de treinta años de respeto mutuo en términos artísticos. “Ambos hemos madurado y experimentado mucho en la vida”, dice. “Por ello, cuando nos reunimos, todo ese respeto mutuo, ese cuidado que nos prodigamos, lo que a cada quien le preocupa del otro… no hay otra forma de realizar el trabajo”.
A mediados de los años noventa, Martin Lawrence y Will Smith no se conocían antes de que, de la nada, Lawrence llamara a Smith para saber si a la estrella de “Fresh Prince of Bel-Air” le interesaría formar equipo con la estrella de “Martin” en una cinta para adultos sobre dos policías amigos. Lawrence tenía el guion y su hermana, fan de “Fresh Prince”, le sugirió dicha llamada telefónica. El resultado fue no sólo la creación de una de las grandes parejas en la historia del cine sino asimismo una amistad profunda en la vida real. “Es la mejor llamada telefónica de mi vida”, dice Lawrence.
“¿No es esto lo que todos queremos? ¿Alguien en quién contar, sin importar el motivo?”, añade Smith. “Esto es parte del placer de estas cintas- los chicos malos hasta la muerte realmente estarán juntos hasta la muerte”.
Los fans de la franquicia- así como los mismos Smith y Lawrence- se muestran agradecidos: ha sido la más corta espera para una nueva entrega en la historia de la franquicia. “Contamos con muchas oportunidades para crear un tercer capítulo a lo largo de los años, pero no fue sino hasta que todo cobró forma con Bad Boys for Life y así dimos con una película a la altura de nuestras expectativas”, explica Smith.
La nueva cinta nos muestra a Mike Lowrey y Marcus Burnett inmersos en el peor de los pantanos: cuando surge evidencia nueva que implica al fenecido Capitán Howard en toda una vida de crímenes atinentes a las drogas, los Chicos Malos juran que limpiarán su nombre… incluso si esto significa quedar justo en el punto de mira del cártel y del cuerpo de policía.
Pero, según el productor Jerry Bruckheimer, a Lowrey y Burnett les da lo mismo: “Creo que ambos disfrutan lo que hacen”, dice. “Ahora que se encuentran fuera de la ley, esto les fascina igualmente, y no hará sino generar más caos”.
Bruckheimer comenta que esta habilidad para mostrar semejante química sólo es posible con personajes que el público ha aprendido a conocer y adorar. “El gran éxito de esta franquicia tiene que ver con el hecho de que les gusta compartir pantalla”, dice el veterano productor. Y Bruckheimer es alguien que sabe de estas cosas: a pesar del intervalo de diecisiete años entre Bad Boys II en 2003 y Bad Boys for Life en 2020, la tercera cinta de la franquicia recaudó más de $424mdd alrededor del mundo y se convirtió en el lanzamiento más exitoso de ese año.
Adil comenta que la creación de esta magia no es mero accidente, sino un arte refinado que exige una buena dosis de ensayo. “Se les ocurren mil cosas durante las lecturas, mencionan ideas graciosas que los escritores capturan al vuelo. En el set desarrollan todo lo que habían estado ensayando. Todo parece espontáneo, pero en realidad es algo muy pensado”.
“Trabajar con Will es muy sencillo”, dice Lawrence. “Sabe extraer lo mejor de todos los demás. Es como un atleta que eleva las aptitudes de la gente de su propio equipo- todo mundo sabe que cuando es hora de trabajar con Will, no hay tiempo para ser pusilánimes”.
Smith devuelve el cumplido: “La comedia de Martin es única, porque te hace enamorarte de él mientras ríes con él” dice. “Es vulnerable, y siempre halla la manera de convertir esto en una fuente de carcajadas. Creo que esta vulnerabilidad es uno de los ingredientes secretos de Martin- el público y Mike Lowrey están siempre con Marcus. Y como Marcus estima a Mike, a pesar de toda su locura, Mike termina por caerte bien”.
Adil & Bilall retoman el timón de la cinta luego de haber dirigido Bad Boys for Life y tras haber propiciado las mejores reseñas de la franquicia, tanto por parte de la crítica como del público. “Cuando teníamos diecinueve años y estudiábamos en la escuela de cine en Bruselas, soñábamos siempre con ser parte de Hollywood, y pasábamos el tiempo bromeando con que, si alguna vez lo lográbamos, lo mejor sería crear una cinta de los Chicos Malos- Bad Boys 3, por ejemplo”, comenta riendo Bilall. “Obviamente, jamás creímos que lo lograríamos hasta que pudimos proponérselos a Jerry y Will. Y aún tenemos que pellizcarnos el brazo. Éramos fans, así que la sensación que todo esto genera es sumamente surrealista”.