Medidas para detener erradicación de coca

El narcotráfico es un problema de permanente preocupación para el país, por sus consecuencias nefastas para la salud y por su accionar delictivo, con secuestros y ejecuciones de involucrados en dicha actividad ilícita. Y a pesar de que desde el oficialismo periódicamente se anuncia operativos para erradicar las hectáreas no permitidas para cultivos de la coca, hasta el momento no son suficientes y tropiezan con una serie de dificultades.
En ese sentido, hace poco se ha conocido mediante medios de comunicación que en el Chapare, zona conocida por producir coca con destino al narcotráfico, en siete campamentos donde se debía eliminar coca excedentaria, cocaleros han organizado un prolongado bloqueo y vigilancia para evitar que efectivos de la Fuerza de Tarea en Conjunta (FTC) salgan a cumplir con sus labores en las áreas fijadas. Según recientes informaciones, también dirigentes de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, se oponen rotundamente al cambio del director de la Unidad de Desarrollo Económico Social del Trópico (Udestro), pidiendo que esta entidad y la Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización (Digcoin), sean presididas por afines a Evo Morales. Por su parte, el viceministro de Sustancias Controladas hizo saber que “la sobreproducción de la hoja coca se encuentran en las zonas autorizadas, el 76% en el caso del Trópico y un 24% en zonas no autorizadas”.
Tales hechos y actitudes de los cocaleros hacen ver que es dificultosa la erradicación en territorios como el Chapare que, al parecer, goza de autonomía y donde pueden oponerse a esa tarea que es urgente. Además, quedan en entredicho los anuncios oficialistas en sentido de que se combate contra el narcotráfico, cuando los cultivos de coca aparecen hasta en parques nacionales y otras zonas poco conocidas.
No obstante que se sabía que la materia prima para la fabricación de cocaína es la coca, particularmente la del Chapare, en Cochabamba, por no ser apta para el masticado tradicional, como sí lo es la de los Yungas de La Paz, se ha ampliado la cantidad de cultivos de esa hoja permitidos legalmente. Al respecto, durante el gobierno de Evo Morales, en 2017 se cambia la Ley General de la Hoja de coca, para aprobar la ampliación de 12 a 22 mil hectáreas de cultivos. Y en 2023 la cantidad pasa de las 30 mil hectáreas, además que en otras regiones aparecen plantaciones de coca excedentaria.
Debido a que la elaboración de drogas y su comercialización otorga millonarias ganancias, es difícil creer que los cárteles de otros países no han incursionado en el país. Por otra parte, ya no es novedad conocer noticias sobre grandes cargamentos de cocaína decomisados en países vecinos y distantes. Por todo ello, mientras no se haga operativos contundentes para reducir la cantidad de coca excedentaria, incursionando libremente en territorios como el Chapare, no se podrá hablar de una lucha eficaz contra el narcotráfico.