viernes, septiembre 6, 2024

El lenguaje

Segunda Parte

Por: Lic. Héctor Molina

 

Recordemos que…

 

El lenguaje es una facultad cognitiva que permite a los seres humanos comunicarse entre sí mediante un sistema estructurado de signos, tanto verbales como no verbales. Este sistema puede ser hablado, escrito, o incluso gestual (como en el caso de las lenguas de señas). El lenguaje es fundamental para la interacción social y la transmisión cultural, ya que es a través de él que se comparten conocimientos, experiencias y valores.

 

Historia del lenguaje

 

Considerando que el lenguaje es una herramienta mágica que los humanos han estado desarrollando desde hace miles y miles de años.

 

El inicio de todo

 

Hace unos 100,000 años, nuestros antepasados vivían en pequeñas comunidades y necesitaban comunicarse para sobrevivir: cazar juntos, protegerse de los peligros, y, por supuesto, compartir historias. Los primeros «lenguajes» no eran como los que usamos hoy. Eran más bien sonidos, gestos y gruñidos. Piensa en el «¡grrr!» de un tigre para avisar de peligro o en mover las manos para señalar algo.

 

El primer lenguaje

 

Con el tiempo, estos sonidos y gestos empezaron a volverse más complejos. Así nació lo que llamamos lenguaje protohumano. Imagina que es como la primera versión de un juego que aún estaba en desarrollo, con reglas simples y mucho por mejorar.

 

Las primeras lenguas escritas

 

Luego, hace unos 5,000 años, algunas civilizaciones, como los sumerios en lo que hoy es Irak, empezaron a escribir. La escritura fue un paso gigante porque permitió que las ideas se conservaran y compartieran más allá del tiempo y el espacio. Imagina que tu amigo te envía un mensaje, pero en vez de leerlo en tu móvil, ¡lo tallas en una piedra! Así nacieron los primeros alfabetos y sistemas de escritura.

 

Las grandes familias lingüísticas

 

Con el tiempo, las lenguas se fueron diversificando. Al igual que una familia grande tiene muchos parientes, los idiomas también tienen «familias». Las más importantes son:

 

  1. De aquí vienen idiomas como el español, inglés, alemán, ruso, y muchos más. Es como la abuelita de un montón de lenguas en Europa y Asia.
  2. Sino-tibetana. Esta familia incluye el chino y el tibetano, entre otros. ¡Piensa en la cantidad de gente que habla estos idiomas hoy en día!
  3. Afroasiática. Aquí encontramos lenguas como el árabe y el hebreo, muy importantes en la historia del mundo.

 

Evolución y cambio

 

Los idiomas no son estáticos. Evolucionan con el tiempo. Por ejemplo, el inglés de hace 1,000 años es tan diferente al actual que casi parece otro idioma. Esto pasa porque las sociedades cambian, y con ellas, el lenguaje. Nuevas palabras nacen, otras desaparecen, y algunas cambian de significado.

 

El mundo globalizado

 

Hoy en día, con internet y las redes sociales, los idiomas se mezclan más que nunca. Nuevas palabras aparecen en el vocabulario cotidiano, como “selfie” o “emoji”, y los idiomas siguen evolucionando a un ritmo acelerado.

 

Un futuro incierto

 

El futuro del lenguaje es incierto. Quizás sigamos creando nuevos lenguajes, o incluso podamos comunicarnos de formas totalmente nuevas con tecnología. ¡Quién sabe si en el futuro hablaremos con las máquinas o usaremos lenguajes visuales o de realidad virtual!

 

La historia del lenguaje es como un viaje emocionante que nunca se detiene. Desde los primeros gruñidos hasta los emojis, el lenguaje siempre ha sido y seguirá siendo nuestra manera más poderosa de conectarnos con los demás.

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