El Gobierno resaltó que, pese al contexto nacional e internacional adverso, Bolivia tiene los costos de vida más bajos respecto a otros países de la región; sin embargo los precios siguen en aumento. Los economistas sostienen que el crecimiento de la economía nacional será el más bajo de la región y se configura alta inflación con recesión, lo que significa una cercana estanflación.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) informó que la inflación acumulada en Bolivia a septiembre de 2024 es del 5,53%. El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, explicó ayer que este aumento se debe principalmente a los productos importados, como los artículos de limpieza e higiene personal, entre los cuales se encuentran la pasta dental (51,66%); champú en frasco (15,24%), pañales desechables para bebé (23,76), entre otros.
“Si los precios de los bienes importados aumentan en sus países de origen, también se incrementan aquí, independientemente del componente del dólar, que también influye”, afirmó.
Para el economista Gonzalo Chávez, en los países vecinos la inflación está controlada, y en algunos casos el porcentaje baja, por lo tanto, no incrementaron los precios en las naciones de origen, el problema es de la economía nacional.
Chávez sostuvo que la espiral inflacionaria continúa a tiempo de que se genera una desaceleración de la economía. Entre enero a marzo de la presente gestión la economía nacional registró 1,31% de inflación, por lo que se va configurando un escenario de inflación con recesión, que se llama estanflación.
En entrevista con una cadena televisiva, Chávez informó que la inflación anualizada de septiembre de 2023 a similar mes de 2024, alcanzó a 6,1%, mientras que los alimentos subieron en 7,9%, las medicinas en 6,1% y productos de tocador en 14,1%. Las cifras muestran que hay saltos y aceleración de la inflación.
Gobierno habla de una inflación importada de socios comerciales, pero no hay inflación en estos países, indicó a tiempo de señalar que antes el importador pagaba un dólar al tipo de cambio oficial de 6,96 bolivianos, pero la escasez de la divisa y las políticas implementadas por el Banco Central de Bolivia, provocaron la creación del mercado paralelo.
Pero ahora el importador paga por el dólar masa de 10 bolivianos, una elevación de más del 50%, y por lo tanto el mercado paralelo rige las importaciones.
Mientras tanto, el presidente del Colegio departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, indicó que si tomamos el periodo 2014-2024, la inflación del mes de septiembre 2024 es la más alta en comparación con el dato de este mismo mes en todos estos años.
“El año 2013, al mes de septiembre, tuvimos una inflación de 1,36%, en el año de la pandemia (2020), fue de -1%. Solo en el año 2018, fue de 0,80%. Lo mismo ocurre con la inflación acumulada de enero a septiembre de 2024, que fue de 5,53%, es la más elevada comparando con los demás años desde el 2014”, señaló Romero.
La gestión 2013 reflejo un dato de inflación acumulada de 5,65%, un poco mayor al del 2024. En el año de la pandemia este dato fue de solo un 0,45%. Luego, solo el 2014 refleja un dato elevado, de 3,49%, agregó.
“La pérdida del poder adquisitivo de los ingresos de los bolivianos es notoria, y la devaluación de la moneda nacional por la inflación es palpable. Ha calado hondo la escasez de dólares y una divisa paralela cara, elevando el costo de vida de la población. Que hasta la fecha no se han evidenciado medidas económicas sostenibles para evitar que estas consecuencias de la crisis fiscal, comercial, monetaria y cambiaria no se vayan agravando más hasta el final del 2024”, reflexionó.