Hay que extirpar y exterminar de Bolivia, la cultura del bloqueo, el chantaje y la impunidad, que es lo que el pueblo boliviano demanda por mucho tiempo. Hacer el más pequeño mal a la Patria es una cobardía. Bloquear las carreteras, que son las venas y arterias principales de nuestro país, es un atentado contra la economía nacional, tanto para la importación como para la exportación de productos y servicios. El bloqueo y el chantaje son una pérdida económica para el país. Toda Bolivia pregunta a sus autoridades ¿qué hacen? ¿Seguirán permitiendo que el malvado ande libre?, eso el país no se los perdonará. Queridos compatriotas, contra el vicio, la demencia y la maldad vamos a combatir. No hay que conspirar contra la salud, ni la economía de la Patria.
Cumplir y hacer respetar las leyes, mantener el orden, he ahí la tarea elemental de todo gobierno, pero como vivimos bajo el régimen del MAS, aquí todo es un desgobierno absoluto. Por el otro bando, nada hay de justo en los reclamos y condiciones políticas del ala evista para comenzar el diálogo. Es necesario admitir que tienen derecho a que se respete su libertad, pero no pueden obstaculizar el libre tránsito en el país, no pueden seguir gobernando bloqueando la libertad. Ustedes no son el partido de la libertad, ustedes como instrumento político, pertenecen al partido de la autoridad en declive, de la autoridad moral vencida, a la autoridad en retroceso. En eso se ha convertido el Movimiento al Socialismo (MAS), en una autoridad en retroceso.
Hoy la Democracia reniega de sí misma, porque todo se ha hundido entre nosotros, por culpa de la soberbia y la ceguera de un solo individuo, que con tal de zafar de su actual situación jurídica prefiere hundir al país en el caos y el chantaje. El MAS, partido opuesto al orden establecido, viene a tomar armas para hacer la guerra a las instituciones democráticas y a los amantes de la libertad y del Estado de Derecho. Eso es el MAS, es el partido político del terror y el chantaje. La intolerancia del ala evista, es la escoria de la hipocresía del ala arcista. El sentimiento de la Patria es uno de los atributos que, con muralla infranqueable, nos separa de los irracionales que amenazan con bloquearla y dividirla. La cultura de la impunidad, debe acabar para siempre.
Estos dirigentes mal intencionados intentan persuadir al pueblo boliviano de que hay persecución política contra del ex mandatario. Nada es más vil y falso que decir que su lucha y movilización es para salvar al pueblo boliviano de la crisis económica. Es una falacia, una mentira que atenta contra la honra y dignidad de todos los bolivianos. Uno de los medios que utilizan los facciosos del ala radical evista es desfigurar, distorsionar la verdad de los hechos por los cuales se acusa al ex mandatario. Es cosa inadmisible e impura que atenta contra la inteligencia del pueblo boliviano.
La base de nuestro sistema político, es el derecho del pueblo a ejercer su soberanía por encima de cualquier interés mezquino. Por capricho e impunidad quiere el ex mandatario estar por encima de las leyes y la Constitución Política. Si su objeto es entorpecer o paralizar la acción del gobierno constituido por el pueblo, están equivocados los del ala evista. Estos hombres ambiciosos, astutos e inmorales no podrán destruir la esperanza de cambio del pueblo boliviano. Por esta razón, pueblo boliviano, tu tarea consiste en disminuir y mitigar cualquier abuso de poder e impunidad de parte del ex mandatario y del actual presidente del Estado, mediante la participación y opinión en la vida política nacional.
No debemos aceptar ni apoyar bloqueo alguno, ni actos de violencia contra la autoridad legalmente establecida, aunque todos estemos en desacuerdo con su gobierno. No se está negando el derecho a la protesta establecido en nuestra Constitución Política, pero cuando se moviliza a la gente para defender el interés de una sola persona, en contra del interés general de la Nación, algo está mal en nuestra sociedad. Todos los derechos vitales de las minorías y las mayorías están asegurados por la CPE. Por eso es muy importante recalcarles a los defensores del ex mandatario, no se equivoquen, no calculen mal, saben muy bien lo que les estoy diciendo.
Bolivianos, a la Patria que sufre hay que ofrendarle nuestra vida, por este pueblo que ha soportado tanto abuso, por esta patria que no quiere el bloqueo, sino trabajo, por ella que nos cobija a todos, debemos entregarle todo. Dejemos atrás la cultura del bloqueo, el chantaje y la impunidad. Conoce muy mal conoce nuestra quien solo incita a la violencia y al bloqueo, como chantaje para asegurar su impunidad ante los tribunales de justicia. No queremos políticos de papel, no queremos dirigentes sociales títeres de un dictador. Queremos políticos sacados del molde y el conocimiento de la realidad política y económica de nuestro país. Basta de extorsionar al pueblo para beneficiarse particularmente.
Esta tempestad política provocada por las bajas pasiones del ex mandatario debe acabar. Este torrente infernal acabará cuando se haga cumplir la ley, con la unidad de todos los bolivianos contra la tiranía del MAS. El ex mandatario y el actual presidente del país no comprenden que sus acciones públicas y privadas están sujetas a la censura del pueblo. De este golpe a su imagen, el ex mandatario nunca podrá levantarse y las pretensiones del presidente arce de reelegirse nuevamente están hechas añicos. La libertad ha sido la cuna Bolivia, se ha criado en la libertad y se alimenta de pura libertad, aunque haya pasado por momentos oscuros, como éste en su historia.
Jhonny Vargas es Politólogo y Docente de Postgrado.