Uno de los problemas mayores que tenemos es que tardamos mucho tiempo en aprender a amarnos, pues experimentamos culpa por todo y por nada, nos maltratamos demasiado cuando colocamos expectativas demasiado altas y nos convertimos en nuestro peor enemigo. Al compararnos con los demás, terminamos frustrados con nosotros mismos.
Estamos esperando, tanto hombres como mujeres, que alguien nos venga a rescatar… ¿de quién?, ¿de nosotros mismos? Buscamos el amor de alguien, porque no te diste cuenta que tú puedes dártelo, buscamos la aceptación de los demás, menos de la nuestra.
Tenemos que añadir valor a nuestra vida; para ello revisa tus rutinas día a día, ve cuáles son benéficas para ti y cuáles debes eliminar, depurarlas. Replantea tus sueños, deja de lastimarte por varias situaciones pasadas; quizás por lo que quisieras ser y ahora no eres, o lo que quisieras tener y no tienes, es momento de hacer las paces contigo mismo.
Ten cuidado de volverte preso de los fantasmas del pasado. No permitas que algo que sucedió hace tiempo te siga afectando, cada día es un nuevo despertar. Hoy regálate un punto y aparte para continuar tu vida, escribiendo tu historia que aún no termina y la que puedes dejar plasmada. Cada día trae su propio afán.
La vida no consiste en recordar el pasado con dolor y tristeza, ni ver hacia el futuro con ansiedad y angustia; más bien consiste en actuar con amor, alegría, fe y esperanza.
Vives en un continuo presente, el tiempo es solo una ilusión de tu mente. El ser humano vale por sí mismo; tan solo por haber nacido eres importante y valioso.
Te ayudarás si dices adiós al personaje que te hace daño, puedes elegir, deja de exigirte y acéptate. La vida es una sucesión de momentos, unos mejores que otros, pero todos nos brindan la oportunidad de hacer algo con ellos; incluso los malos momentos nos regalan la oportunidad de superarnos. Recuerda que un momento difícil te brinda la oportunidad de aprender, por ejemplo, a ser más paciente o a cambiar el rumbo de tu vida.
Lic. Mariela Baldivieso Lema, Psicóloga Clínica.
Correo: marielabaldiviesolema@gmail.com