Tras la extradición a Estados Unidos del exjefe antidrogas de la Policía, Maximiliano Dávila, la Fiscalía decidió que su situación jurídica en Bolivia sea definida por el Tribunal Sexto de Sentencia Anticorrupción y Violencia contra la Mujer de La Paz, en el proceso por legitimación de ganancias ilícitas.
El tribunal deberá determinar si Dávila será sometido a un juicio en rebeldía o si el caso se suspenderá hasta su retorno del país norteamericano.
La fiscal del caso, Rocío Feraudi, informó que se encuentran en los actos preparatorios para el juicio oral y contradictorio, dado que ya existe una acusación formal presentada contra Dávila y otras dos personas.
“Estamos hablando de legitimación de ganancias ilícitas. Continuaríamos en relación a si se lo va a juzgar en rebeldía o, tal vez, la autoridad judicial determinará separarlo para que el proceso continúe respecto a los otros acusados”, señaló la fiscal.
Feraudi también explicó que se ha notificado con la acusación a las partes acusadoras, como el Comando General de la Policía y el Viceministerio de Transparencia, para que presenten sus proposiciones acusatorias. Una vez cumplido este procedimiento, se notificará a Dávila para que asuma su defensa.
La fiscal recordó que en la acusación formal solicitaron una sentencia condenatoria con la pena máxima por el delito de legitimación de ganancias ilícitas, tanto para Dávila como para los otros dos implicados, quienes serían familiares del exjefe policial.
El caso se originó a raíz de movimientos económicos sospechosos que no coincidían con el perfil económico de Dávila, los cuales fueron registrados mientras ejercía como director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn).
En Estados Unidos enfrenta acusaciones por conspiración para la importación de drogas hacia ese país y por portación y uso de ametralladores para fines de narcotráfico, por lo que podría enfrentar cadena perpetua. (Con datos de Erbol)